I'M CURIOUS | © BANGCHAN

، 34 ？

me senté de forma distraída en el banquito alto de la barra, chan seguía hablando de algo que no había prestado atención, y me había sentido tan culpable que no podía parar de pensar al respecto completamente ignorando el hecho que seguía hablando.

busqué con la mirada y haneul ya se había ido de la fiesta dejándome con este problema explotandome sobre los brazos, me sentía distraida y con todos estos sentimientos complicados que no podía resolver por mi cuenta. escondí mi rostro entre mis manos, la música ya me hacía doler la cabeza y mis auriculares no servian de mucho para callar por completo el problema.

yo sentí unos brazos al rededor mío, haciéndome sentir mejor y peor al mismo tiempo, por que sabía que si incluso me llevara a casa y le pidiera volver el se quedaría a mi lado arruinando la fiesta para él. lo abracé con fuerza molesta conmigo misma por no poder controlar mis acciones y el resopló, tomándome entre sus brazos de todas maneras para salir de la fiesta.

yo hice una mueca una vez estuvimos afuera, la música seguía siendo fuerte pero era tolerable y el seguía buscando mi rostro para verme a los ojos. algo que parecía imposible en este momento para mí.

─¿que sucede?─susurró él, acariciando mis manos mientras quería llorar─ ¿no quieres hablar ahora leah?

yo negué con impaciencia y el resopló mirando a su alrededor, se alejo de mi de forma rápida, corriendo hasta la casa. y yo no sabía como decirle que no tenía que hacer esto, sintiéndome incluso peor al respecto.

─¿vamos? ─preguntó él, acariciando mi espalda una vez volvio, yo negué con la cabeza de nuevo y el me miro frunciendo el ceño, podía verlo a traves de mis dedos, no lo entendía en absoluto─ ¿que pasa? ¿no quieres irte?

yo asentí con la cabeza y el suspiro mientras pensaba mirando a su alrededor.

─¿no quieres que yo vaya contigo?─pregunto y yo asentí una vez más, sus ojos me escanearon de arriba a abajo─ ¿por qué? ¿necesitas tiempo a solas?

no podía responder con un sí, de hecho no, queria volver a casa con él pero me sentía terrible por arruinar la diversión de esta manera. negué con la cabeza, haciéndolo confundirse aún más.

─¿entonces...?─sus palabras pararon, pero no dijo nada, pareció resignarse. de hecho temí que se hubiera enojado conmigo, pero solo abrió la puerta a mi lado.

yo me senté dándole la espalda, me sentía avergonzada de ni siquiera ser capaz de hablar, pero estaba bajo tanto estrés que ni siquiera podía hacerlo. el se quedó un momento ahí, mirando a su alrededor, tomando algo de su mochila y conectándolo a su estéreo.

hubo un silencio una vez empezó a reproducirse, luego se escucho... sonidos del mar, quise ponerme a llorar por una tonteria como esa, pero le había importado lo suficiente como para traer esto solo por si acaso... significaba tanto para mi algo tan pequeño que me fundí en el asiento bajando las manos de mi rostro.

─¿vamos a comprar...?─sus palabras se lo pensaron bastante─ ¿helado y gaseosas?

yo me reí mordiendo mi labio inferior, un momento después pude asentir con la cabeza, el estaba tarareando una canción de las de la fiesta. estaba tranquilo, por lo que me hizo sentirme de la misma manera. chan era como el verano, y yo era como el océano... me gustaba eso.

─¿sabes? la fiesta no estaba tan buena, deben contratar un dj la próxima vez...─reclamó el haciendo una mueca cuando esperábamos a un semáforo, y yo tuve que reprimir una sonrisa tonta escapando mis labios, lo que lo hizo reír de la misma manera.

─¿sería mejor si pusieran tu música?─pregunté lentamente y el volteó a verme con una sonrisa, algo tonta, como la que sostenia yo probablemente.

─oh, eso sería una fiesta increíble.─me dijo riendose, haciéndome reir por lo bajito.

ya con un helado entre mis manos y una lata de sprite en la otra, pude dejar que la conversación fluya con normalidad. y de fondo ya no habían sonidos de agua, sino una tonta canción dulce de algun grupo de chicas.

─¿jyp?─preguntó y yo lo pensé frunciendo el ceño, llevándome otra cucharada de mi helado a la boca

─ellos te contratarían como idol, no como productor...─admití burlándome y el sonrió halagado, fingiendo un ego que se veía hasta falso en él.

─oh, claro, mírame después de todo...─murmuró el y yo me reí negando con la cabeza─ ¿de qué es el tuyo?

el miró sobre mi helado, ambos eran de crema en un tarrito, el de él sin embargo tenia salsa de caramelo y el mío de fresa.

─¿fresa? pero no sabe a fresa en absoluto.─admití dándole un sorbo a mi lata y el sonrió volteando a verme

ambos nos quedamos mirando algo torpemente, hasta que lo vi acercase a mi, sosteniendo levemente mi mejilla sus labios estaban tan cerca de los míos cuando suspiré alejándome de él.

sus ojos me buscaban una vez más, y mordí mi labio con vergüenza.

─ya sé que no debería...─susurré dejando mi helado sobre la guantera─ pero no puedo evitar sentirme culpable... ella cree que lo estoy haciendo como una venganza.

bajé la mirada a mis manos, entre ellas estaba la lata fría, congelando mis dedos, pero se sentía bien tener algo con lo que no perder el hilo de la realidad. un suspiro me hizo volver a mirarlo, no me estaba mirando, solo estaba mirando al frente.

─¿y lo estás?─preguntó y yo bajé la mirada de nuevo, antes que nuestros ojos se encontraran. mordí mi labio con fuerza aún con la culpa sobre mis hombros.

─tal vez en un momento... pensé qué...─me sentía terrible, se sentía incluso peor ahora diciéndolo frente a él─ pensé qué esto era como una venganza... yo, no lo sé.

me moví de repente y la lata se derramó sobre mis piernas, haciéndome sentir incluso peor, a punto de llorar. chan no dijo nada y su silencio parecía estar matándome.

─¿por qué importa tanto lo que ella diga?─susurró él, acariciando mi cabello, mientras yo empujaba aún más mi cabeza hacía abajo con nervios─ estás saliendo conmigo, ¿no?

mi labio ya dolía al igual que mis ojos, yo suspiré con más ganas de llorar que nunca.

─leah...─su voz me llamó y yo levanté la mirada─ escucha. terminar conmigo no va a solucionar nada en este momento.

yo lo miré con tristeza, sintiéndome culpable por siquiera pensar en ello.

─mírame... ─me pidió acariciando mi mejilla, yo lo intente, al menos me enfoque en sus labios, en su mejilla, en su frente.─ yo estoy contigo, justo ahora. ella puede aceptarlo o no, ¿qué importa? no es una relación entre los tres ¿o si?─dejo que se le escapase una risa tonta y yo bajé la mirada.

─¿por qué sigue molestandome?─le pregunté y el se encogió de hombros, tirando su cabeza hacia atras

─¿por qué sigues escuchandola?─preguntó cansado, sosteniendo mi cintura, para pasarme a su asiento, sin mucho esfuerzo. ahora estaba sobre él, a punto de llorar.─ deja de hablar con ella, ¿uhm? no es tu amiga, tus amigas son irene y seulgi... ¿no?

yo asentí con la cabeza, enfocándome en el borde del cuello de su camiseta, que estaba sosteniendo entre mis dedos, jugando con la tela.

─¿entonces? ¿porque sigues hablando con ella cómo si su opinión importase?─susurro buscando mis labios con molestia, y yo deje qué me bese como siempre lo hacía.

después de todo sus besos lo arreglaban todo.