❛ PERO INCLUSO LAS ESTATUAS SE DERRUMBAN SI ESTÁN HECHAS PARA ESPERAR ❜
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edmund pevensie x oc
ubicado en el príncipe caspian
littleoldpoet » 2023 - 2024
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❝ ¿de verdad creíste que podría olvidarte? ❞
El nerviosismo la consumía. Elinor aguardaba a que llegara el correo día a día, esperando escuchar su nombre. Sin embargo, después de más de una semana, aún no había noticias.
—¿Aún nada? —Caire le dirigió una mirada cargada de simpatía al acercarse a su mesa por la mañana, en el comedor—. Ya llegarán, Elle.
Sally la contempló con curiosidad, pero no comentó nada hasta que la delegada se alejó hacia su propia mesa.
—¿Hace cuánto que os conocéis Caire y tú, por cierto? —preguntó la que, por el momento, era su única amiga en la escuela, fuera de Caire.
—No lo sé —respondió Elinor, dando largas—. Parece que toda una vida.
Sally arqueó las cejas, dejando claro que aquello no le había servido de mucha ayuda, pero decidió ignorar el tema. Las dos delegadas, Caire y su compañera, se acercaron poco después para repartir el correo de las alumnas de primero. Una vez más, Elinor no recibió carta alguna; no pudo evitar quedarse contemplando con pesar los dos sobres que le fueron entregados a Sally.
—¿Esperas noticias de casa? —preguntó su amiga en tono amable, mientras abría distraídamente la primera de sus cartas. Elinor esbozó una mueca.
—Algo así.
«Me escribirá. Tiene que hacerlo.»
—Ya llegarán. —Sally le dirigió una sonrisa animada—. ¡Alégrate un poco! Hoy es la primera salida al pueblo. ¿No tienes ganas?
Elinor se tragó su «no» y se limitó a asentir sin mucho entusiasmo. ¿Qué podía hacer, si no?
St. Malory se encontraba cerca de un pequeño pueblo que las alumnas podían visitar durante algunos fines de semana al curso, siempre que recibieran autorización de sus padres. En él, solían comprar dulces de todo tipo, ropa, útiles escolares, libros o cualquier cosa que necesitaran para su vida allí. También había varios establecimientos en los que solían reunirse para merendar juntas, según les habían contado las alumnas de cursos superiores. Las compañeras de Elinor estaban bastante ilusionadas por la inminente visita, una ilusión de la que ésta no lograba contagiarse.