°• don't worry darling •°

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Me había quedado solo a ver películas por la noche con mi novio. Se supone que iba a irme, pero me quedé dormida a mitad de la película.

Al día siguiente desperté en se cama mientras el tomaba una ducha, así que decidí levantarme para empezar a alistarme yo también. En cuanto me levanté pude notar lo mojada que me sentía, mire la sábana de la cama y tal y como esperaba, había una notable  mancha color marrón en el lugar donde yo había dormido.

Que vergüenza, por qué tenía que ser aquí.

Quite las cobijas para poder quitar la sábana. Estaba por quitar la sábana, cuando pude escuchar como mi novio salía de la ducha.

— Jack, no salgas!!— le advertí

— ¿Por qué?— preguntó extrañado y juguetón a la vez.— Necesito cambiarme.

— Solo espera un momento.— pedí apresuradamente— Al menos hasta que yo te diga.

— ¿Qué pasa ahí afuera?— preguntó, pero está vez saliendo del baño con una toalla enredada en su cadera, y con su cuerpo y pelo aun mojado.

Tapé la cama rápidamente con las cobijas que anteriormente ya había quitado a lo que el soltó una risa.

— Manchaste la cama, ¿verdad?— preguntó mirándome fijamente y una sonrisa juguetona en su rostro.

Solo me quedé parada ahí con la mirada hacia el suelo, no sabía que contestar pues tenía mucha vergüenza ahora mismo.

Y encima él estaba únicamente con una toalla, jamás lo había visto así.

— Oye mírame.— me pidió levantando mi cara con su mano.— No te preocupes, solo fue un accidente, no voy a juzgarte o algo así cariño. Ahora limpiemos esto de acuerdo.

Dijo todo con una voz tan dulce que pude sentir las mariposas en mi estómago. Cada que el me miraba o hacia cualquier cosa las sentía.

— Puedes ir quitando la sábana en lo que me cambio en el baño. Solo déjala en el cesto, cielo.— seguido de eso tomo su ropa y se metió al baño a cambiarse.

Hice lo que me pidió. Me preocupaba que también el colchón se hubiese manchado. Afortunadamente no.

Salió y enseguida tomó aquel cesto para luego ir a abrir la puerta de la habitación.

— No te preocupes, solo fue un accidente.— me aclaró con una sonrisa cálida y luego tomó camino al cuarto de lavado.

Después de ese incidente me dispuse a hacerle desayuno, era lo menos que podía hacer, así que baje y empecé a hacerlo para que cuando Jack bajase ya esté listo.

Hoy Jack tenía exámenes importantes de la escuela y es por eso que tenía que irse ya.

— Lo siento bonita, pero tengo que irme.— dijo levantando su plato y llevándolo a la cocina.

— Está bien.— dije comprensiva— ¿Te importa si me quedo hasta que llegues?— pregunté esperando su respuesta.

— No para nada, tu puedes quedarte el tiempo que quieras amor.— respondió dulcemente y después miró la hora de su teléfono.— Mierda llegaré tarde, es mejor que me vaya. Adiós te amo princesa.

Se despidió de mi con un corto beso en los labios y se fue.

Había pensado en salir a caminar un rato pero al final solo me duche y me puse la pijama de Jack para pasarla un rato con butters (el gato de Jack) viendo cualquier cosa en la tele.

Pasaban las hora y yo estaba cada vez más aburrida, ya no sabía que hacer por lo que me quedé dormida en el sillón unas largas horas con butters.

Al parecer fueron demasiadas porque un sonido en la cocina me despertó, era Jack había vuelto.

— ¿Que tal? ya despertaste bella durmiente.— dijo riéndose y poniendo una bolsa de plástico sobre la barra de la cocina.

— Ja Ja. Que gracioso.— me quejé simulando una risa.— ¿Que es eso?

— ¿Qué es que?— respondió con otra pregunta

— Lo de la bolsa.— señalé curiosa.

— Oh, que idiota. Ven y ábrelo.— dijo riendo y haciéndome una señal con su mano para que me acercase.— Es para ti.

Fui hasta su lugar y tome la bolsa para después abrirla. Pude percatarme que eran demasiados dulces los que se encontraban en aquella bolsa, mas que nada eran chocolates.

Se me hacía muy lindo que se haya molestado en pasar a un super a comprar todo esto, en lugar de solo llegar a casa.

— Siéntate. Prepararé un té.— me tomó de las mejillas para darme un beso tierno en la frente y luego sonreírme.

Así la pasamos el resto del día, el consintiendome y yo disfrutando.

Eran tantos dulces que ni siquiera pudimos terminar ni la mitad de la bolsa entre los dos.

Quería disculparme por no haber subido nada desde hace un poco más de dos meses tal vez.

La razón por la que no había subido nada es muy simple. La verdad es que no sentía ganas de escribir y mucho menos tenía ideas, claro a parte de estar ocupada con asuntos personales.

Y se que a lo mejor no tendrá el mismo apoyo que antes, pero si me gustaría seguir actualizando, puede que ya no tan seguido como lo hacía cuando inicie, pero si seguiré haciéndolo.

Gracias por la paciencia y apoyo que me han brindado.

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⏰ Última actualización: Aug 15, 2023 ⏰

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