RESIDENT EVIL: KOOMIN

Cap.9 ☢️ EXTINCIÓN ☣️

Cinco años después:

Hola, este es Jimin, después de cinco años estoy de vuelta, Umbrella creyó que con la explosión que provocaron al hacer estallar una bomba atómica sobre Seul iban a detener el Virus, pero no fue así. En menos de veinticuatro horas, Seul ya estaba invadida, dos semanas después acabo con Busan y en menos de un mes  toda Corea y finalmente meses después el resto del mundo. Los lagos y ríos, enteros se sacaron, los bosques y las selvas se convirtieron en nada por la falta del líquido vital, la tierra comenzó a morir lentamente.
¿Mis amigos? Bueno, ellos están bien o eso quiero pensar, el grupo volvió a separarse luego de que yo me escapara de Busan, solo nos manteniamos a salvo en las pequeñas ciudades, para evitar a toda costa las inmensas Ciudades en especial  Seul y Busan. Decidimos separarnos y cada quien se fue por su lado. Yo me quedé para proteger a la población casi extinta en Daegu, la última vez que hablé con Jeon, fue hace un año y hasta el momento no se nada de él. Con Jung deje de tener comunicación también y por lo último que se, es que Jeon iba a ir a Seul y Jung a Busan, con la esperanza de encontrar sobrevivientes.

Residente Maldito 3 // EXTINCIÓN

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Por otro lado... En las instalaciones subterraneas de Umbrella...  Tokio Japón.

— ¿Alguna noticia doctora Park? — Cuestiona una voz masculina tan potente y gruesa que da miedo escucharla.

El dueño de esa voz magistral es nadamás y nada menos que el dueño de todo esto, el presidente y dueño de la Corporación Umbrella, el señor Kim NamJoon.

A pesar de estar presente en la junta corporativa como un holograma, Kim NamJoon se miraba intimidantemente atractivo y fuerte, estaba todo vestido de un pulcro traje negro, en la bolsa del saco traía un pañuelo blanco doblado en un triángulo, su cabello negro peinado hacia atrás, la corbata perfectamente ajustada, su pulcra camisa blanca a juego con el elegante adorno en la bolsa del saco y un par de anteojos de sol adornaban sus hermosos ojos color avellana, tes morena y un par de hoyuelos que adornaban sus mejillas al sonreír. La seriedad que transmitía a través de sus frías palabras, te harían helar la sangre y sentir un escalofrío recorer por todo tu cuerpo, la presencia de NamJoon era magistralmente hermosa y aterradora también.

— Señor, he estado trabajando con clones del proyecto Jimin,  mis estudios indican que su sangre puede no quitar el virus del todo, pero hará que los sujetos sin alma se domestiquen como si fueran un pequeño cachorro. — Contesto aquella mujer.

Ella es la doctora Park Shie Hi, aquella mujer que se llevó del accidente del helicóptero a Park Jimin cuando se estrelló en el río Han.

De cabello largo, fina y tersa piel blanca, con curvas en su cuerpo pronunciadas, enfundada en una bata blanca de médico, cabello largo y castaño claro ondulado que le llegaba a la cintura, estaba sentada de frente al holograma del presidente Kim, con un par de bolígrafos que estaban dentro del bolsillo de la bata una te tinta negra y la otra de tinta azul. Hablaba serenamente mientras cruzaba las piernas de manera sensual y provocativa para mostrar y exponer sus trabajos en torno a Jimin, después de los eventos en Seul y Busan.

— No me puedo fiar de un clon, doctora Park. ¿Usted insinúa que debemos de mantenernos ocultos bajo tierra como las hormigas mientras aparece el proyecto Jimin original? — Refutó de inmediato las ideas de la doctora.

— Así es presidente Kim, estamos a un paso de localizarlo, puesto que hemos lanzado al espacio un satélite para dar con él. — Dijo muy segura de si misma aquella hermosa mujer.