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-Nos vemos la próxima semana -dijo la rubía-

-Nos vemos -dijo Karli despidiendose de su terapeuta-

-Si necesitas algo no dudes en llamarme -dijo lizz-

-Ajam, cualquier cosa te llamo -dijo la roja mientras se dirige a su departamento-

Faltando unos metros para llegar a su departamento, la rojita logro ver a un alto hombre con campera de cuero parado en la puerta de su edificio

-dios... Que hace acá -dice Karli en sus pensamientos-

-james levanta la vista y ve a la rojita de lejos-

-karli llegó a la puerta de su departamento y no dijo nada solamente buscaba sus llaves para poder abrir-

-¿Como estás? -dijo james poniéndo ambas manos en los bolsillos-

-¿No fui clara ayer? -dijo la roja sin mirar a james-

-Si... Pero igualmente quería hablar -dijo James acercándose a Karli-

-James... Ya te perdone, ya está, ahora solo te toca irte y no volver ¿si? -dijo Karli mientras abría la puerta-

-Ese es el problema... -dijo el castaño mirandola-

-¿Cual? -dijo la colorada gritándose y mirando a James-

-No quiero alejarme de vos... -Hizo un paso hacia adelante-

-james... Andate, no quiero llamar a la policía -dijo la roja haciendo unos pasos hacia atras-

-Karli... No se cómo explicar lo que me pasa con vos -dijo James desde su lugar-

-James... te tengo miedo -dijo la rojita con lágrimas en los ojos-

-No voy a lastimarte... -dijo el castaño-

-Ya te perdone... Ya está, tu conciencia tiene que estar limpia -dijo la roja mientras las lágrimas caían por su rostro-

-Ok... Está bien, lo entiendo cuando estés lista capaz podamos hablar -dijo James Alejándose un poco-

-Cuando sepas cómo comunicarte lo intentamos -dijo la roja-

-Karli... Al pasar este tiempo con vos fue la primera vez que pude dormír sin tener pesadillas, realmente me hace bien pasar tiempo con vos -dijo el castaño en un intento de comunicarse-

-¿Y eso que? -Dijo ella-

-No sabes lo importante que es eso... -Dijo james- no quiero alejarme y volver a tener pesadillas realmente

-karli miro pensativa hacia dentro de su casa, por un lado pensaba que si debía dejarlo pasar y hablar bien las cosas, por otro ¿y si el soldado todavía estaba?-

-hoy no James... Otro día quizás si -Dijo la roja entrando a su departamento-

-Ok... Está bien -dijo el castaño alejándose del departamento de la rojita-

-Más tarde ese mismo día Karli no fue a trabajar sino que se quedó acostada pensando en lo mucho que quería a James pero sus traumas del pasado no la dejaban en paz-

James

-¿Cómo decis? -dice Buck a su moreno amigo-

-yo creo que lo mejor es dejarla en paz hasta que se le pase -dice Sam mientras se abre una cerveza-

-¿y si no se le pasa? -dice Buck mirado a su amigo-

-¿y para que la queres? Ya te perdono Buck listo -dijo sam-

Sucede en mi mente - Pausada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora