Narradora Emilia- dojo soryuu.
Vagando por el dojo por si encuentro algo para vender, encontré un libro en el doyo debajo de unas tablas, junto a una horquilla con dos copos de nieve que se uso como separador. Casi al final hay páginas en blanco donde escribiré algunas cosas. No entendía las letras, solté un suspiro y después guardé el libro. Tenía otras cosas más importantes en que pensar. Tenía que cambiar las piedras brillantes para que, con ese dinero, viajar al bosque de Elior. Pero primero necesito ubicarme para ver qué tan lejos estoy. Le preguntaré a Ketaro si me puede conseguir mapas.
Pasaron ya casi un mes.
Mis ojos miraban con pánico el mapa de Japón. Estaba en otro país. Mis manos se movieron rápidamente para ver los otros mapas. Yo solo buscaba una pista del bosque de Elior, pero no había ninguna.
-"Quizás el gremio de aventureros pueda darme pistas. Sé qué tan lejos estoy del bosque de Elior."-
Saqué mi libro para escribir algunas cosas, lo necesario para lo que quizás me pidan en el gremio.
- "Siendo sincera, este pueblo no es tan pequeño como dicen. Bueno, según mi perspectiva, los pueblos en su mayoría viven en condiciones precarias por culpa de las mabestias o porque las zonas seguras no son fértiles. Pero este pueblo vive bastante despreocupado como para no preocuparse por cosas como la seguridad de los muros. Además, la tierra parece fértil. Las tierras fértiles son ocupadas por las mabestias o los nobles. Además, viajar es muy peligroso tanto para personas como para comerciantes. ¿Habrá un gremio de aventureros cerca?."-
- ¿Qué haces?- preguntó mirando lo que escribí como si tratara de recordar algo. - Emi-ch.- Antes de que pudiera terminar de hablar, fue interrumpida por el grito de su padre que estaba en el patio armando algo.
- ¡Youko Emilia ya puse la malla! - nos llamó con algo de felicidad en su voz.
- Emi-chan vamos a jugar. - dijo con emoción tomándome de la mano. Debo de decir que me gusta mucho que me tome de la mano con tanta confianza.