Tus ojos en mis ojos.

Prólogo.

Esto transcurre hace algunos años.

Mamá date prisa para llegar al concurso. – Barry vamos a tiempo.
¿Segura mamá? (Pregunto un pequeño niño quien era Barry).
Segura ahora déjame conducir.

Algunos minutos después la tragedia empezaba el suceso que dejaría en trauma a un niño quien más que nadie sabrá que lo que pasará será su culpa.

Al estar en el tráfico aburrido dirigía sus manos a los ojos de su madre quien rápido pedía que quitará sus manos pero Barry no hacía caso y mantenía su posición hasta que pasaba la mayor perdida de Barry.

Un auto impactaba el coche en el que iban Barry y su madre todo se oscurecía.

La sirena de la ambulancia se escuchaba en todos los alrededores la noticia corría.

“Fuerte choque donde un coche quedaba incrustado en una pared con la parte de atrás completamente destruida.”

Rápido eran los afectados llevados al hospital más cercano y con gran fama, eran atendidos, una contusión cerebral era diagnosticada en un niño aunque la doctora de ese momento decía que se iba a recuperar.

Aunque la misma suerte no corría alguien… la madre de Barry era llevada a quirófano de urgencia rápidamente llegaba Henry padre de Barry y Alice su hermana mayor al hospital y recibían las noticias de los médicos.

Cuando abría los ojos Barry habían pasado algunas horas en ese tiempo Nora madre de Barry había estado en quirófano durante 8 largas horas las esperanzas de que sobreviviera eran pocas  aún así Henry se arriesgo porque el más que nadie sabía que las posibilidades eran un juego al azar en el que su esposa podía sobrevivir.

Hermanito no te muevas. – ¿Dónde estoy Liz? – Estás en el hospital Barry tuvieron un accidente. – ¿Y mamá? (Pregunto Barry). – Ella está bien lo importante es que te recuperes.

Las lágrimas acumuladas en los ojos de Alice hermana mayor de Barry no resistían y caían por sus mejillas mostrando el gran miedo que tenía por perder a su hermano.

Voy a avisarle a papá que has despertado Barry. (Dijo Alice). 
Quiero ver a mi mamá.

Con esas palabras Alice salía rápido a avisar a su padre quien tenía su mirada perdida hasta que recibía la noticia que su pequeño había despertado y solo faltaba saber de su esposa.

Barry como podía salía de su cuarto y al salir y ver a su padre con su hermana escuchaba la peor noticia que podía recibir.

Lamentablemente su esposa no resistió la cirujía murió a la mitad de esta operación. (Dijo una joven doctora de cabello castaño).

Al oír esas palabras el corazón de Henry se detenía al igual que Alice no podía creer que su madre había muerto, después de unos minutos ambos veían a Barry quien caía de rodillas al saber la noticia las enfermeras lo ayudaban a levantarse.

Papá ¿Y mi mamá? (Pregunto Barry). Ella estará bien hijo. (Dijo Henry).
Papá escuché que está muerta.

El silencio reinaba en ese lugar hasta que Barry hablaba.

Mi mamá está muerta por mi culpa.
No digas eso Barry, fue un accidente.
No papá yo… —traga saliva— yo le… tape los ojos a mamá.

Con esa confesión Barry se hundía en el dolor al saber que su madre murió por su culpa.

El entierro de Nora había sido un martes y para el miércoles Barry era dado de alta del hospital ese mismo día iba a ver a su madre pidiendo perdón de rodillas por lo que hizo.

En la noche tenía un sueño que lo atormentaría toda su vida, su madre estaba ahí y solo podía recordar unas palabras de su madre.

“Asi como tú me arrebataste mi vida, la oportunidad de ver crecer a Liz yo te quitaré algo que tanto te gusta, ahora tu mundo será blanco y negro y lo único que te apasiona lo abandonas ese es tu castigo hijo, te amo Barry.”

Al final de un mes ya con Barry soñando a diario lo mismo por fin podía regresar a sus actividades normales con precaución, durante ese mes Liz se había alejado de él, más que nadie sabía la razón y esa era que el había matado a Nora.

Así que se refugio donde solo podía en una partitura en blanco y negro de la melodia favorita de su madre “Penas de amor” aunque existen alegrías de amor Nora siempre tocaba penas de amor porque nunca habrá felicidad por completo.

Barry empezaba a tocar esta pieza tal y como Nora la tocaba pero en cierto punto dejo de escuchar las teclas del piano eso provocó un gran miedo en Barry quién no sabía el porque.

Ni al tocar más fuerte las teclas del piano no se escuchaba solo era un sonido que se desvanecía en el fondo del mar.

Con eso un gato negro cruzaba por la ventana, Barry pensando que quizás era normal que no escuchará bien decidía ir a descansar sin dejar de estudiar su mayor herencia… esa partitura de su madre que la cuidaría con mucho amor.

Prometiendo que haría caso a todo lo que le pedía su madre en vida sin repelar nada y sobretodo se cuidaría donde dormir y cuidaría al piano como lo cuidaba su madre.

Sin siquiera saber que eso nunca lo podría cumplir por un trauma que le fue provocado sin saber que en muchos años en un mismo accidente iba a perder a alguien muy importante en su vida, y de igual forma le dejaría un precioso regalo que cuidaría como un tesoro.

Porque recordara ese día como el hoy, no hay nada como ella, el día que la besara será uno de sus mayores dolores, hay algo más inexplicable como su mirada inigualable la manera en que lo cela y trata de disimular que está bien.

Va a cuidarla por las noches va a amarla sin reproches la va a extrañar en la tempestad y aunque existan miles de razones para no estar con ella no hay nadie más.