Un bosque ensordecedor

Pesadilla (1)

Tengo noches sin dormir, casi siempre me quedo mirando el techo contemplando mis luces de colores que reflejan planetas, me distraen de una recurrente pesadilla: una sombra desesperada, intenta gritar, pero el bosque en el que se encuentra es demasiado profundo y parece que está vacío, su grito es imperceptible, al inicio mientras más tiempo veo su desesperación más lo puedo oír hasta el punto en el que tengo que despertar de lo ensordecedor que se vuelve su grito lleno de dolor.

Estoy acostada en mi cama viendo hacia el techo, no pude dormir, otra vez. Tengo esa extraña pesadilla: un hombre en el bosque desesperado, intentando gritar, no se le oye, pero yo lo escucho, se escucha como un susurro para los demás... pero para mí grita más fuerte que nunca. Me ensordece.

Me siento en la cama, veo la hora, temprano para mí, la hora perfecta para mi madre. Me levanto me visto y me dirijo al comedor. Y ahí está viendo unos papeles, como es la reina tiene muchas cosas que hacer, me acerco a ella y no se da cuenta de mi presencia hasta que me sirvo un vaso de agua entonces me habla sin levantar el rostro:

- ¿Cómo dormiste? ¿Ya se fueron las pesadillas? - y justo cuando le voy a responder me mira y vuelve a hablar- Leni- suena preocupada- Te ves más cansada de lo usual, ¿Te estas tomando el té? - Asiento con la cabeza, me toca la frente y pasa su mano con suavidad y mágicamente me siento mejor.

Es momentáneo ya lo ha hecho antes, pero ya no funciona igual, cada vez me siento peor por no dormir y no entiendo el por qué, tomo una tostada y un jugo de naranja.

-Tengo mucho trabajo y debo hablar con Dorotea, pero cuando termines tu clase de equitación podemos hacer algo juntas- Se levanta de la mesa, me da un beso en la frente y se va.

Termino mi desayuno, me ducho y me cambio por unos pantalones beige, una playera blanca, cuando estoy por ir a decirle a mi madre que ya me voy escucho una conversación por accidente:

-Es tiempo... lleva meses con esas pesadillas... Si, pero no seas negativa... no puede, lo lleva en la sangre, es casi imposible... deja de decir tonterías, tenemos que ir al bosque y hablar con "Regina", me va a confirmar que todo está bien... Bueno, hablamos luego. 

- ¿De qué habla? ¿Qué llevo en la sangre? ¿Qué hay en el bosque? ¿Quién es Regina?

Me alejo un poco y regreso como si no hubiera escuchado nada, aunque es difícil mantener mi postura después de lo que acabo de escuchar.

-Ya me voy.

-Que te vaya bien Leni, me avisas cuando salgas y no te entretengas, quiero que estés en casa temprano, vamos a salir.

...

La equitación es muy simple, son carreras, pero el caballo vuela y puedes tomar distintos caminos, depende de tu poder o habilidad, los poderes se empiezan a manifestar al cumplir los 18/19 y a los 20 o 21 nos dan clases para poder controlarlos y usarlos. Voy a pie porque no quiero tomar el bus, además voy temprano y no esta tan lejos.

A donde me querrá llevar mi madre, es decir conozco a mucha gente sabia, cuando llegan a los 85 años dejan de hacer muchas actividades pues comienzan la edad adulta pero la mayoría, si no es que todos son muy sabios por toda su trayectoria, así que podría llevarme con quien sea, aun que sonaba muy seria.

Llego al entrenamiento y estoy perdida en mis pensamientos, me caigo varias veces hasta que el instructor decide que es tiempo de un descanso. Me siento a un lado de mi caballo, se llama Rino, ha estado en mis 17 años de vida y de hecho ella tiene solo 7 meses más que yo. Le cuento lo que ha estado pasando por mi mente, no contesta, pero me siento escuchada.

Termina la practica llega el momento que menos esperaba del día, regresar a casa e ir a ese lugar que escuche a mi madre hablando por accidente, ¿Por qué no me dijo nada? Y cuando pensé que tendría todo el camino de regreso para seguir pensando veo a mi madre sonriendo arriba de un carruaje. ¿Qué hace aquí? Nunca viene por mí.

-Cariño- No la escucho y lo repite- Cariño.

-Ah, perdón.

-No te preocupes, ¿Cómo te fue en el entrenamiento?

-Más o menos, ando algo dispersa, ¿Y eso que viniste?

-Me pareció algo lindo, toma te traje un jugo de moras, tu favorito. - Lo dice con su cálida voz de siempre.

-Gracias.

Me acabo el jugo y me está dando sueño, mucho sueño, más de lo normal y cuando estoy a punto de cerrar los ojos veo que nos desviamos, espera este no es el camino. ¿A dónde vamos?

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Primer capitulito de este gran libro, estaba dudosa si publicar o no ya que no quiero que salga una historia apresurada.

Espero que hayan disfrutado leer este capitulo y agárrense para el que sigue.

Cuéntenme, como les pareció? 🤗

Besoss 😘

Pd: Hola hola

Gente linda y querida de mi corazón este libro esta en proceso así que ténganme muucha paciencia y si ven algún error ortográfico, de redacción, etc. Díganme plis para corregirlo.