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Por los pasillos de Hogwarst caminaban Dumbledore, Raeliana y McGonagall, con la niña en medio de ambos y en su hombro al ave

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Por los pasillos de Hogwarst caminaban Dumbledore, Raeliana y McGonagall, con la niña en medio de ambos y en su hombro al ave.

Ella iba de la mano de su ahora "abuelita", junto a su nuevo amigo, Faw, cómo le había apodado al gran fénix, y este gustoso respondía.

Parecía mágico lo rápido que el ave se encariñó con la Weasley, pero bueno, hablamos de magia cuando están en una escuela llena de ella, es natural.

Era la hora de la cena, los alumnos de Hogwarst recién habían llegado, para algunos eran su primer año, otros era el último y algunos iban entre ambos años.

Al llegar, Dumbledore se giró hacia la pequeña, quién aún sujetaba la mano de McGonagall.

━━━Escucha pequeña, entraré al lugar, anunciaré y recibiré a los nuevos estudiantes, se realizarán algunas presentaciones y luego, entrarás tu con esta capa, tapandote el rostro, junto a la profesora.

Raeliana observó la capa negra que había en la brazos de su abuelito, la cogió y con ayuda de su nueva abuelita se la puso, el ave se volvió a posar en su hombro cuando se cubrió con la capa.

Dumbledore entró al lugar, mientras ellas quedaron fuera, mientras el hombre entraba, Rae pudo observar largas mesas cubiertas de personas.

Desde fuera se pudo escuchar un rato nombres de personas y gritos que decían

¡Gryffindor!

¡Slytherin!

¡Ravenclaw!

¡Hufflepuff!

Eso la confundió, aunque hizo memoria y recordó que eso era el nombre de las diferentes casa de la escuela, sus tíos dijeron que pertenecieron a Gryffindor junto a toda su familia.

Esperaba estar ahí.

Luego se escuchó una música, seguido por la voz de su abuelito.

Miró a la mujer, esperando algo.

Tal vez entrar ya.

━━━Es hora.

Rae la miró, algo nerviosa.

De repente, las puertas del gran comedor fueron abiertas, los estudiantes y los profesores que no estaban enterados de la situación observaron con notable duda a la profesora McGonagall entrar sujetando la mano de un niño pequeño cubierto con una gran capucha negra.

Harry observó como Fawkes iba en el hombro de el niño, eso lo desconcertó.

McGonagall camino a paso firme hasta estar a un lado de Dumbledore, quién en ningún momento dejó de mirar a la infante, y al verla a un lado, miró nuevamente a sus estudiantes, aún desde su lugar.

━━━¡Una nueva información! -todos atendieron confusos y en espera de la cena━━━éste pequeño que ven aquí, estará en nuestra escuela por una larga temporada.

𝚁𝚊𝚎𝚕𝚒𝚊𝚗𝚊 𝚆𝚎𝚊𝚜𝚕𝚎𝚢// Harry Potter Donde viven las historias. Descúbrelo ahora