Capítulo 3

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POV Cihangir

Me desperté con un dolor de cabeza pero menos que antes, al abrir los ojos la luz me deslumbró, tarde un rato hasta poder adaptarme a esta, poco a poco me fui sentando sobre la cama. Mire a los lados notando que estaba solo en la habitación y de mi frente callo un paño mojado en agua fría, supuse que había tenido fiebre o algo así. Me levanté con dificultad y sentí un leve mareo, de pronto la puerta se abrió y vi a una criada, al verme levantado se me acercó rápidamente y me volvió a tumbar en la cama me dijo que esperara aquí y que iba por un médico.

Me revisaron y me dieron una medicina para el dolor de cabeza pero no me hace falta, al rato llegaron mis hermanos que en cuanto me vieron saltaron a abrazaron con tadas sus fuerzas.

Abdullah- Menos mal que estás bien, pensamos que no despertarias...

Cihangir- De que habláis, solo he estado dormido un día.

Murad- Un día... Llevabas sin despertar una semana entera...

Cihangir- ¡¿Qué?! Una semana, hay no... Lo siento no pase ningún día con ustedes y se los había prometido...

Mehmet- No pasa nada, podemos pasarla juntos otro día, ahora solamente tienes que descansar y no estar alterado.

Cihangir- Bien, lo intentaré.

Ruslam- Si, más te vale, no quiero enterarme de qué te has desmallado otra vez.

Miray- Yo tampoco.

Cihangir- Jaja, si está bien, pero ahora quiero dormir así que adiós.

Ahmed- Ya nos hechas, si acabamos de llegar.

Mustafá- Si, quieres que me marche, yo, tu hermano favorito.

Bayaceto- Tu no eres su favorito, yo lo soy, ¿cual de nosotros es tu favorito Cihangir?

Cihangir- No voy a meterme en en ese jueguito, fuera ya.

Selim- Bien, pero esto no se quedará así.

Cihangir- Ya claro, ja ja ja (Sarcástica).

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Hace unas horas mi madre vino, estuvimos hablando, estaba muy preocupada, pero tenía que ocuparse de unos asuntos así que me dejó con una niñera... ¡Una niñera! No necesito una niñera, soy lo suficientemente maduro como para cuidarme solo, detesto ser pequeño y lo peor es que la que me cuida es Firuze, si esa la que es una espía y quiere matar a mi padre, que suerte la mía. Aún que pensándolo bien podría hacer que se pusiera de mi lado y dejé todo eso atrás, como lo haré, muy simple, la trataré bien, haré que me coja cariño y me vea como a un hijo y así pensará las cosas, o quizá no...

Firuze- Príncipe, ¿Se encuentra bien? A estado muy callado...

Cihangir- Si, lo siento es que eres muy hermosa.

Firuze- Ohh gracias príncipe usted también es muy guapo.

Cihangir- Gracias, ¿quieres ir al jardín conmigo?

Firuze- Príncipe, usted no debe salir, recuerde que tiene que reposar.

Cihangir- Vamos, será nuestro secreto, promesa de meñique...

El ángel del pecado Cihangir Donde viven las historias. Descúbrelo ahora