La Última Flor

Capítulo 2

Comí la ensalada con la mirada baja, en el lugar solo se puede escuchar los cubiertos chocando con la porcelana:

- Alice sostén bien el tenedor

Levante la mirada, ella tiene el puño en el cubierto y parece realmente incómoda:

- El cubierto es demasiado grande madre... ella aún es pequeña

- A su edad tú lo sostenía bien

Mis cejas se fruncen, le devolví la mirada a mi madre:

- Su mano aún es pequeña, madre ella tiene 4 años

- En ese caso que no coma si no va a hacerlo correctamente

Puedo ver las mejillas de Alice sonrojarse mientras mantiene la mirada baja, ella va a llorar, me levante rápidamente:

- Nosotros comeremos en la mesa de la cocina... disfruten su cena

Con ayuda de Ivan y los sirvientes Alice y yo nos movimos, sabía que no saldría fácilmente:

- No olvides Reese que hablaras conmigo después de que Alice duerma... ve a mi oficina

- Sí...

Y salí de la habitación, miré a Alice quien aún tiene la mirada baja:

- No hiciste nada malo Ali...

- Mamá está molesta

Que diga eso con su voz quebrándose hace que mi corazón no se sienta cómodo, la abrace y pude sentir lágrimas en sus ojos:

- Mamá siempre está molesta, no es culpa de Ali...

- Waa!

Al final no comió tanto y la niñera la llevo a lavarse, cuando tuvo el pijama puesto la ayude a acostarse poniendo las mantas correctamente:

- Hermano...

- Si?

Ella puso sus ojitos en mí mientras le dedico una sonrisa, pienso que seguramente pedirá que le lea su libro favorito de nuevo, pero su mirada es diferente:

- Te iras?

- Eh?

No lo esperaba, mi cuerpo se congeló un tiempo sin saber muy bien como responder, pero ella me mira fijamente, hace que no pueda mentir:

- ¿Quién te dijo eso?

- ...

Sabe que es verdad, ella es lista a pesar de su edad ¿verdad? En unos meses cumple 5 años, pero habla mejor que muchos niños de su edad:

- Tendré que irme un tiempo, pero visitaré la casa seguida y saldremos también...

- ...

No llores por favor, no lo hagas te lo suplico, ella giró abrazando su muñeco de felpa, no insistiré porque seguramente está enojada ahora:

- Dulces sueños Alice...

Apague la luz y salí con un nudo en la garganta, seguramente mis ojos están algo rojos, pero me trague este sentimiento y camine hacia el estudio de mi madre para después tocar la puerta:

- Entra y cierra la puerta

Hice lo que pidió y camine hasta estar frente a su escritorio, ella también bebe una copa de vino:

- Firmarás un contrato Reese

- ¿No es suficiente mi palabra?

Ella ríe y sostuvo una hoja hacia mí la cual sostuve "Contrato" como título:

- Quien haría válido este contrato...

- No me tientes Reese, te lo resumiré, No le digas a Helen la razón por la que te casas con Luke, ella cree que a ti te gustaba su hijo... y no te divorcies al menos hasta que la compañía se estabilice

Apreté la hoja entre mis dedos, estoy siendo obligado a todo esto y es horrible:

- Dame una fecha límite... en que se estabilice

Ella lo pensó por un tiempo viendo los papeles en la mesa con una mano en su barbilla, no la interrumpí, pero mi cabeza duele:

- 4 años...

- ¿4?

Cuatro años es mucho para estar casado con alguien a quien no conozco, mi rostro seguramente lo reflejo:

- No me culpes a mi Reese, fue tu padre quien decidió gastar el dinero en apuestas... yo solo intento salvar a nuestra familia

- ¿No te parece bajo que usas a Alice para obligarme a hacer todo esto?...

Ella se levantó mientras yo siento una mezcla de emociones atacarme, siento que vomitaré:

- Si fuera cualquier otra cosa tú no aceptarías ¿no es así hijo?

Está cerca de mí, respiré violentamente y lance el contrato:

- Déjame llevarme a Alice, tú quédate con la empresa y todo el dinero...

- Parece que no lo entiendes Reese

Claro que no lo entiendo porque una madre normal estaría preocupado por la seguridad de sus hijos, pero la mía no, a ella no le interesa Alice:

- Si la compañía Mitchell no se unifica con la nuestra... la nuestra desaparecerá en un año, los bancos no nos darán préstamos porque debemos demasiado... Firma Reese

- ... Pero dejarás que venga a visitar a Alice...

Mis palabras se balancean entre la petición y la orden:

- Mientras siguas el contrato...

Recupere la hoja y tome un respiro antes de firmarlo también, puedo ver mi mano temblar:

- Bien, puedes irte

- ...

Tampoco quise decir más, le entregué el papel y salí de la oficina, cuando estuve fuera en el oscuro pasillo un ruido me sorprendió, mi padre está parado frente a mí sosteniendo un vaso lleno de whisky con una mirada algo extraña, por al menos cinco segundos intercambiamos miradas sin decir nada:

- Deberías regresar a dormir... es tarde

- Sí...

Fue un intercambio de palabras corto y posteriormente bebió de su vaso mientras se aleja en dirección a su oficina, regrese a mi propia habitación y edite algunas líneas de mi trabajo en el ordenador algunas horas, supe que no podría mantenerme despierto más, con algo de mal humor me deje caer sobre la cama y no note cuando me quedé dormido