Pólvora. [Peaky Blinders] (PAUSADA/EN CORRECIÓN)

Cap. 4 "Recuerdos"

Cuando la fogata finalizó. Todos volvieron a sus casas, luego de escuchar el discurso que Thomas dictó para el periódico, festejaron y victorían sobre eso, estaba segura que mañana se hablaría sobre eso y la popularidad de los Peaky Blinders volvería lentamente pero volvería. Habría que seguir ayudando y evitar nuevas habladurías y todo volvería a la normalidad. Sin embargo, fue Victoria quien a mitad de la noche, le cerró todo lo que Thomas venía tratando de hacer.

Un nuevo caballo, un disturbio, la solución de ese disturbio en público. Tommy era más capaz de solucionar las cosas confidencialmente, directamente con la persona con la que tenía el problema, ya que podía fingir demencia y evitar las cosas. Sin embargo, esta vez fue amplio, lo publicó en el diario y eso era algo que sin duda llegaría no sólo a todo Birmingham sino a todas las personas que estuviesen interesadas por eso. Teniendo Small Heath en la mira por las armas, sumada a esta fogata de los retratos del rey, todos se interesaron poniendo el foco en que quizá, sea en este fin del mundo, donde una nueva guerra explote. Pero detrás de todo esto, había algo más. Y Victoria aunque tarde lo entendió.

— ¿Quién es?--- preguntó ella sin rodeos.

— ¿Yo? Thomas Shelby. — dijo él, sin entender a qué se refería. Ella volteandose frente a él para verlo a los ojos volvió a preguntar.

— ¿para quién es todo esto?

— Para el nuevo policía, pensé que había quedado claro. — dijo esquivo, encendiendo un cigarro.

— Y para quién más Tommy, de quién quieres la atención, qué estás buscando. Y no se te ocurra decirme que no intentas nada detrás porque insultas mi inteligencia.

— Luego. Vendrás a dormir a casa de Polly hoy.

El fuego iba disminuyendo hasta que eran pocas las tablas que aún estaban, hechas brasas. La gente se fue. Y todos emprendieron su camino a sus casas, los Shelby también. Todos caminaban rumbo a la casa de Polly. Thomas iba caminando más lento detrás de un Arthur con una botella de vino puesta, John burlón detrás y Finn siguiéndolos, luchando contra el sueño. Victoria iba al lado del líder, poniendo un poco diferencia entre el primer grupo y ellos.

— Quién—

— Billy Kimber.

— !¿Estás loco?! —- ella levantó la voz, consiguiendo la mirada fría de él, quien la mandó callar sin una sola palabra.

— Es simple, nosotros no vamos a buscarlo, él viene a nosotros...

— y luego, qué. ¿Qué buscas negocios con él?

— He ahí una gran diferencia, busco su negocio, no hacer negocios con él.

— Sabes que te estas metiendo en una guerra no Thomas?--- preguntó ella seria deteniéndose — espera— dijo deteniéndolo junto a ella — No puedes decir eso e irte, no es tan sencillo.

—- es sencillo, tú lo haces complicado, simplemente es ir tirando el piso a sus pies, hasta derribarlo.

— Thomas, no estás cavando túneles en Francia, estás hablando de arrebatarle el negocio a uno de los líderes de las trampas y la mafia local, te das cuenta de lo que quieres hacer.

— Tú no te das cuenta de que sería una gran oportunidad para ampliar el negocio. Es simple, se va a hacer, porque el plan ya lo empecé, estás adentro o no. Fin. — y diciendo eso, retomó su caminar más apurado.

No era novedad que cada paso que daba ella lo sospechaba. Había aprendido eso con el tiempo, confiar plenamente en algo o en alguien no era bueno. Y mucho menos en un plan en donde muchas personas estaban involucradas. Confiar en las locuras de Tommy siempre costaba, pero siempre salían bien. ¿Por qué esta vez sería distinto?