𝐒! 𝐌𝐚𝐥𝐞 𝐑𝐞𝐚𝐝𝐞𝐫 𝐱 𝐌𝐚𝐥𝐞 𝐂𝐡𝐚𝐫𝐚𝐜𝐭𝐞𝐫𝐬!

~DILUC RAGVINDR (Parte 2)~

...

—¿Jacinto?— Susurre mientras sentía que varias lágrimas amenazaban por salir de mi cara.
El extraño alzó la cabeza, y la ladeó un poco confundido por mi expresión y de la forma en que lo había llamado, los dos hicimos contacto visual y pude ver cómo el chico tembló un poco ante mi presencia.
—Lo siento, te equivocas de persona.— Dijo en tono frío y autoritario, tratando de no mostrar su nerviosismo.
Me acerque a él, a paso lento mientras una gota de sudor se asomaba en mi cien. Sin poder creerlo me pare frente a el, Sus ojos, Su cabello, su Cuerpo, su voz, su altura... Todo en el era exactamente igual.
—¿Me estás jugando una broma? ¿Eh, Jacinto? — Pregunté Mientras una de mis manos se dirigía a su mejilla, posando la suavemente en su cara. Ambos sentimos un chizpaso pero el inmediatamente saco mi mano de su cara en un movimiento brusco.
—¿Que crees que haces?— Dijo el pelirrojo un poco encabronado. —Mi Nombre es Diluc, no conozco a ningún Jacinto. Alejate de mi, porfavor.— Dijo el de ojos carmesí, sintiéndose intimidado por la presencia del peliblanco. No podía negar que sintió una atracción innegable, es como si estuviera en presencia de un ser divino.
Desvíe mi mirada algo avergonzado, probablemente un pedazo del alma de Jacinto quiso renacer otra vez.
—Lo lamento.— Susurré mientras trataba de que mi voz no sonara quebrada. —Me equivoqué de persona.—   Hablé ahora tratando de sonar Normal, me di la vuelta y fui a desvestirme para poder cambiarme... En todo el rato sentí varias miradas de reojo del llamado Diluc.
—Disculpa, ¿Nos conocemos?— Oí decir al Macho menor, mientras desabrochaba mi camisa para quitarmela.
—No lo creo.— Dije casi triste, pero con una expresión intachable en mi cara, La mirada de diluc recorrió todo mi cuerpo, sonrojándose al instante al darse cuenta de la invasión de privacidad, yo solté una leve risa.
—Lo lamento, me pareció haberlo visto antes.— Menciono el pelirrojo para segundos después darse la vuelta y seguir poniéndose la ropa, a la hora de ponerse el corset lo ví un poco Confundido en como ponérselo.
Al estar de espaldas a mi, no se dió cuenta cuando le acerque... Mis brazos rodearon su cintura, mi cabeza quedando acostada en su hombro aspirando su olor... Sentí como se tensó ante mi cercanía y solito un breve suspiro ante mi toqué. Lleve mis manos hasta su espalda, trazando un camino con mis dedos desde su abdomen hasta allí. Con cuidado, tome ambos lazos del corset y empecé a apretarlo.
—Gracias.— Escuché un susurró de parte del menor.
—No hay de que, Diluc.— Susurré roncamente en su oído, inclinandome. Sintiendo como su fachada de Seriedad se rompía un poco.
Un escalofrío recorrió la espalda de Diluc cuando el aún extraño invadía si espacio personal... Pero, ¿Ah quien engañamos? Le gustaba esto.
—Aun no te has presentado.— Dijo diluc queriendo saber el nombre de aquel hombre que le causaba tanta intriga.
—Jay, Solo Jay.— Dije alejándome ya de el, mientras el volteaba para mirarme algo sorprendido, seguro ya se había dado cuenta de que soy Jefe de la empresa.
Ya vestidos, alguien entro por la puerta.
—¿Estan listos? Tenemos que empezar.—  Dijo Alhacén, mi camarógrafo y además mejor amigo quien ya sabía quién soy, acomodando sus lentes un poco incómodo por la tensión que se sentía en la habitación.
—Si.— Dije saliendo de la habitación dándole una última mirada a El pelirrojo.

Time Skip

Los meses pasaron, Ah modo que Diluc y Jay se hacían aún más cercanos. No entendía como había llegado a este punto, pero... Le gustaba.

—Ngh...~— Gimió Diluc, quien estaba apoyado en Jay, con sus brazos alrededor de sus hombros, besandose frondosamente.
Tener sexo se había vuelto casi una regla entre ellos dos, ambos eran adictos el uno al otro... Además, Diluc cada vez sentía que Jay no era alguien normal.
—Silencio... Oh nos van a escuchar.— Dijo Jay respirando entrecortadamente, estaban en uno de los camerinos con puertas cerradas, mientras el set los estaba buscando.
—Es... Tu culpa.— Dijo Diluc pesadamente.
—Lo siento, te ves jodidamente sexy en traje, Sería un Pecado no cogerte.— Susurró Jay, mordiéndome el labio, pasando sus manos por los muslos de Diluc causandole un escalofrío.
—Maldicion... Solo hazlo de una vez.— Refunfuño Diluc mientras sentía que sus erecciónes se frotaban más.
—Joder... Diluc.— Dijo Jay, mientras pegaba al chico menor más a su cuerpo y acto seguido masajear sus pechos. Con un fuerte agarre en sus hombros, volteó a Diluc, haciendo que este se apoye en la pared de aquel Armario/Camerino.
Bajando levemente el pantalón de Diluc, revelando sus mejillas coloradas. Jay bajando su cremallera, lo que hizo que Diluc se impacientara aún más, Al fin, Jay sacando su Longitud inhumana.
—Ah...~— Gimieron al unisono, mientras Jay frotaba su longitud con las mejillas ahora mojadas de Diluc por el pre-semen de Jay.
—Solo... Ah~ Mételo, ¿Quieres?— Con estas palabras dichas, y sin preparación anterior, Jay fue insertando poco a poco su miembro dentro de el.
—Maldita sea...~ Con tantas veces que lo hemos hecho y sigues estando apretado. ¿Esto es un Don o tal vez es una maldición que hace que cada vez sea más adicto a ti?— Dijo Jay jadeante, mientras sentía que el interior de diluc lo apretaba aún más.
—A-Apolo...~— Gimió Diluc con lágrimas de placer en sus ojos, mordiéndose su labio.
—¿Que...? ¿Que acabas de... Decir?— Susurró Jay en shock, jadeando roncamente en su oído.
—Apolo...— Siguió repitiendo Diluc, Jay abriendo aún más los ojos salió de su interior y lo volteo para quedar cara a cara, Diluc callo desmayado.
—¡Diluc!— Grito Jay en desesperación, cogiendolo en brazos y al mismo tiempo subiendo ambos pantalones.

Time Skip
Pov Diluc

Abrí mis ojos, ya no estaba con Jay en el camerino. —¿Dónde... Estoy?— Susurré viendo un Campo lleno de flores Jacinto, Me recordó a el penthouse de Jay, este estaba lleno de estas hermosas flores, Vi un pequeño lago, y me acerque a él viendo mi reflejo.
—Uh... ¿Que es esto? ¿Estoy muerto?— Me pregunté a mi mismo, mientras veía mi apariencia, Una pequeña diadema en forma de hojas adornaba mi cabeza, tenía una larga bata blanca, una parte colgaba sobre su hombro, mientras que el resto de mi torso estaba descubierto.
A lo lejos, divice dos figuras abrazadas... Un momento. —¿Somos Jay y yo?— Me pregunté a mi mismo.
—Asi es, o algo asi.— Escuché una voz detrás de mi, igual a la mía. Voltee rápidamente hacia aquella voz.
—¿Quien eres?— Pregunté sorprendido viendo a alguien igual a mi, solo un poco más alto y algo fornido.
—Yo soy tú, bueno, soy una versión anterior de ti.— Dijo sonriendo levemente.
—¿Cómo? ¿De que hablas? ¿Me estoy volviendo loco?— Dije sorprendido y algo nervioso.
—No, no estás loco.—Dijo el extraño para mí. —¿Cómo es posible?— Pregunté.
—Nada es imposible, incluso acostarte con un Dios.— Dijo con una leve risita.
—¿Que estás diciendo?— Murmuré. —Alguna vez... ¿Has escuchado el mito de Apolo y Jacinto?— interrogó ignorando mi pregunta, volteando la vista hacia las dos figuras que ví anteriormente.
—He escuchado un poco, pero no sé mucho.— Respondí intranquilo, un click sonó en mi mente, recordando el primer encuentro con Jay, llamandome "Jacinto".
—Parece que ya te has dado cuenta.— Dijo Jacinto frente a mi.
—Yo soy... ¿Tu?— Dije mientras volteaba la mirada hacia las dos figuras aún abrazadas... El escenario se desvanecía y ahora estaba Jay, o mejor dicho, Apolo, llorando y gritando arriba del cuerpo de Jacinto. Los recuerdos comenzaron a llegar en ráfagas... Si una última vista hacia Jacinto y lo ví sonriendo con lágrimas en sus ojos.
—Cuidalo por mi, ¿Bien?.— Dijo desvaneciéndose.
—¡Espera!— Grite sentandome, abriendo los ojos, despertándome en una habitación de hospital. De reojo ví a Jay, quien estaba a mi lado, cogiendo mi mano mientras dormía, se veía con pequeñas lágrimas en sus ojos.
—¿D-Diluc...?— Dijo Jay mientras despertaba.
—Apolo...— Susurré con lágrimas en mis ojos. Apolo sorprendido, sonrió.
—Me alegra volver a verte, Cariño.— Dijo Apolo sonriendome.
—A mi igual, Amor.—

Ambos sonrieron, dándose un beso profundo lleno de cariño.

~Fin~

...

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