Capitulo 16

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Harry estaba molesto, muy muy molesto debía decir, aunque más que molesto, estaba sumamente irritado, en primer lugar, no le molestaba que su queridísimo prometido no mandara una carta esa semana, ni la anterior a esa, no, nada que ver, tampoco le molestaba que estaba preparando sus maletas para volver a casa mientras está siendo acosado para saber por qué no se quedaría en el castillo para vacaciones de navidad, es que, ¿Que les importa? Tiene una familia ahora, claro que iría con ella, y por último, su tonto hermano no había hablado con él tampoco en las últimas dos semanas, ¡Ni siquiera iba al comedor! Se refugiaba en su sala común y solo iba a clases y no habían pasado tiempo juntos.

Dolió.

Pero bien, nada de eso era algo que le molestaba o por algo de eso estaba irritado, no, rabastan bien podría irse a un maldito campo de flores con cualquier mago de segunda si quería, bien podría no mandarle una maldita carta en todo el año escolar si quería, ¡Bien podría roper el maldito compromiso si tanto quería! Él no estaba interesado en nada de ello, no estaba molesto por eso, claro que no. Y que por fuentes cercanas escuchará como rabastan estaba siendo visitado por un "encantador viejo amigo" no le importaba una mierda. Si tanto quería estar con ese bastardo, pues venditos sean, a él ni le importaba, podía pasar todo el puto año con ese tipo y a Harry no le importaría, claro que no.

"Harry."

"¡¿Que?!, Demonios, ¿Podrían dejarme tranquilo un maldito segundo? Estoy harto." Y claro que todos lo supieron, el que los vidrios del cuarto de los chicos de Gryffindor lo dejaba ver, todos dieron un paso atrás, todos menos Ron que estaba más pálido de lo que podría ser posible.

"Por Merlin, Harry, solo quería saber por qué no te quedarías con nosotros hoy." Y Harry se sintió mal, tomo un suspiro, bien, tal vez se extendió un poco.

"Lo lamento, no tengo tiempo para esto, padre quiere que vaya a casa, es mi primera navidad con ellos y lo haré, te invitaría pero..." Sonrio vacilante.

"Está bien, de cualquier forma mamá no me dejaría ir y pasar un día con malfoy no es algo que quisiera, tal vez ¿Quedamos un día en diagon?" Y Harry se permitió sonreír un poco.

"Bien, claro."

Murmuró despacio, ese día el tren partiría a casa y Harry se iría, Draco seguramente estaba alistando sus maletas y estarían viéndose en el tren aunque sinceramente no tenía ganas de verlo, no estaba molesto como recalcó hace un rato, pero tampoco quería verle la cara.

Bajo a desayunar con tranquilidad y nuevamente, no apareció una carta de su prometido, el apetito se marchó en ese momento y la molestia volvió a él, ni quién quiera una carta de ese tipo, de cualquier manera que tom le escribiera era muchísimo más interesante.

Cómo las últimas semanas, draco no apareció en el comedor y Harry estaba acostumbrado a ello, desayuno poco ese día y leyó en soledad la carta de Tom relatando como iban ciertos avances con su cuñado, Harry estaba feliz por el hombre, Rodo merecía algo mejor que bellatrix aunque sinceramente no sabía si Tom ese era mejor. De cualquier modo, su cuñado sabía que hacer.

Fue una sorpresa para Harry descubrir que después de todo, el señor tenebroso si tenía un corazón y tal parecía que Rod era el dueño de este, Harry somrio divertido, quién podria imaginarlo.....

Ahora, Tom estaba haciendo todo lo posible por insinuarse ante rod, aun sabiendo que debía recuperarse antes de cualquier avance, este le ayudaba en lo mayor de lo posible y Harry estaba al tanto de eso, y también fue el señor oscuro quien le informo a Harry sobre el "viejo amigo" que estaba rondando la casa de los Lestrange sin ninguna malicia aparente pero siendo algo que a Harry le interesaría saber.

La hora de tomar el tren por fin llegó y Harry fue el primero en subir y meterse a un compartimento, ron iría a casa también después de todo, charlie y bill estarían en casa para navidad, pero no tenía ánimos de ir con nadie en el tren, es más, Harry tenía ganas de no ir ya, a su suegro lo había visto repetidas veces en las reuniones del Wizengamot pero lamentablemente no había podido entablar una plática con él.

Cuando el tren partió, Harry se distrajo lo mejor que pudo con su tarea, bien, eran vacaciones pero en algo debía gastar su tiempo, durmió un rato luego y se sintió un poco más relajado, si, tal vez estaba un poco triste pero, no le importaba no quería hablar con nadie.

Draco por su parte iba muy preocupado por todo el tren en busca de su hermano, si, había Sido un tonto al dejar derepente de ir a comer con él y solo ir a sus clases pero, es que debían entender, él estaba confundido, estaba intentando buscar la manera de poder estar alejado de ese maldito pelirrojo que lo hacía dudar de si mismo, solo estaba siendo un cobarde y lo sabía pero no podía evitar serlo.

Al no encontrarlo, entro en un compartimento y se sentó, cerro sus ojos y suspiro mientras mentalmente pensaba dónde carajos estaba su hermano.

"¿Mal día?" Y si no fuera un malfoy, habría saltado del susto en ese momento, pero al contrario, abrió sus ojos y miro al maldito dueño de sus malos pensamientos, se sentó recto.

"No es algo que te interese, Weasley" escupió el apellido con disgusto aún cuando en su estómago algo se removió, no estaba para esto.

El otro río mientras negaba.

"Claro, como tú lo digas, pequeño Dragón." Y antes de que el rojo pintara sus mejillas, Draco salió rápido de ese compartimento escuchando la risa tras de él, maldito y gracioso pelirrojo, cuánto lo detestaba.

Cuando el tren llego a su parada, Draco bajo con prisa mientras era recibido por sus padres, los tres esperaron impacientes a Harry aunque le preguntaron a Draco por qué no bajo con él, avergonzado confesó que había pasado "ocupado" las últimas semanas y no había podido hablar con Harry más que lo busco en el tren y no lo encontró. Preocupados, así se sentían ellos y cuando el último estudiante bajo, lucius estaba listo para subir y buscar a Harry pero, este al fin bajo, con su rostro rojo y agachado, lucius creyó que era vergüenza aunque lo mojado en sus mejillas le dieron a Narcisa algo más en que pensar.

"Lo lamento, me quedé dormido." Se excusa, abrazándose contra su madre, siendo bien recibido, draco y su padre no mencionaron nada pues desde hace varios años Draco no daba tal actuación con su madre y era claro que está extrañaba eso, Harry nunca pudo hacerlo y bien, ellos no le quitaría ese momento.

*Tranquilo cariño, a todos nos pasa.".

Ver a la señora malfoy sonriendo mientras abraza a Harry Potter fue algo extraño, aún cuando esté paso a ser su hijo, los malfoy nunca fueron reconocidos por sus muestras de afecto en público pero con Harry, aquello todo cambio, lucius abrazo a su esposa por los hombros y atrajo a Draco al abrazo, aún si no era algo digno de malfoy, podrían hacerlo por Harry. Los trasporto a todos a la mansión malfoy dónde por fin Harry se alejo de su mamá, sonriendo apenado.

"Iré a mi habitación." Y algo los alerto de eso, no había preguntado por rabastan y mucho menos por sus padrinos. Eso no fue bueno y lo sabían.

Harry se marchó a su habitación, dónde su maleta ya estaba, acostándose en la cama y sellando la puerta de la misma, no quería ver a nadie, suficiente vergüenza fue llorar en el tren y ahora aquí, no, quería estar solo.

Draco tomo su propio camino y Narcisa estaba molesta, lucius por su parte Ya se esperaba lo que vendría.

"Si uno de ellos causo Daño a mi pequeño hijo, te juro que no volverán a entrar a esta casa." Y lucius acepto con calma, cuando Narcisa se ponía de esa manera, era mejor aceptar las cosas tal y como las decía.

Ahora bien, tal vez esto tenía algo que ver con no recibir cartas de rabastan para mandarle a su hijo pero supuso que eso fue por qué las mando directamente él claro, con ayuda de su padre claro estaba, Harry no estaba bien y ellos lo sabían, averiguaría que pasaba y se encargaría de que su hijo se sintiera mejor, como que se llamaba lucius malfoy.

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