PARTE 9

4.9K 238 44
                                    

- Uhm - se escuchó cómo hojeaba un cuaderno. - Tengo tiempo el jueves. ¿Quieres el jueves?

- Sí, Estaría bien el jueves. El martes ya culminan mis clases del colegio.

- Oh cierto.

- Bueno, profe, tengo que irme - sonreí mientras apreciaba mis tacones.

- Espera alumna. ¿Dónde estás?

- Creí que las reglas eran importantes para ti.

- Solo por cuestiones de trabajo, solo quiero saber qué haces. Estoy realmente aburrido bebé - bostezó.

- Estoy en un baile - admití mientras mi corazón se aceleraba ante su voz pronunciar bebé.

- Uhm, ¿Cómo estás vestida? - me preguntó interesado.

- Vestido rojo, realmente ajustado mis muslos y a mi trasero. El abdomen que tanto te gusta se veía perfecta en el espejo, al igual que mi "busto de modelo" - me reí, él también al igual que yo.

- Me encantaría ver como tus ojos a comer y me combina con ese vestido, oh, y tu trasero...

- ¡Iván! - grité sorprendida.

- ¿Qué pasa bebé?

- Eres todo un pervertido- gruñí.

- Me encantaría que esta clase fuer gratis para poder enseñarte el arte del sexo por teléfono - su voz sonó tan gruesa y deliciosa que me hizo estremecer.

- Estoy sintiendo algo extraño en mi entrada - admití asustada.

- Eso está bien preciosa.

- No lo creo - dije algo con temor y con una sensación nueva.

- Créeme que lo es, estás excitada.

Abrí los ojos como platos, lamí mis labios y me llevé la mano a la cintura.

- De verdad tengo que irme. Nos vemos el jueves, profe - dije provocativa.

- Aponte algo lindo, ¿Sí?.

- Lo que diga el profe.

Colgué y regresé a la fiesta. Dios mío. ¿Qué me había pasado?

Después de la fiesta, mis papás y yo regresamos a casa. Corrí en mi cuarto y entré a mi baño. Por primera vez en toda la noche admiré mi físico. Estaba realmente encantadora. Abrí la cámara de mi celular y me tiré una foto frente al espejo y otra con la cámara frontal. Mis ojos estaban delineados con negro y sombreados con café y blanco. Mis labios remarcados por un tono rojo carmesí y mis cejas perfectamente delineadas mi peinado era alucinante, mis amigas me habían decolorado las mechas y le daba un aspecto asombroso a la trenza. Me pregunto cuánto durará mi cabello así.

Tome una toallita húmeda y empecé a arruinar el trabajo impresionante de mis amigas. Lo extrañaría por siempre, pero ya me voy a tomar una foto para recordar lo hermosa que me veía esta noche. Cuando al fin estuve totalmente desmaquilladora, me puse una playera básica de mi padre y unos calzones para dormir. Cepillé mi cabello y lo recogí en una coleta. Lavé mis dientes y me acosté en la cama. Tomé mi celular y le mandé la foto a mi profesor. Sonreí.

"¡Dios _____! Te ves realmente bien. Buen trabajo. Espero que las víctimas lo hayan disfrutado", contestó, reí y me dormí. Ese profesor...

INSTRUCTOR SEXUAL (Iván Buhajeruk y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora