043

450 19 33
                                    





El despertador hizo su entrada a eso de las ocho y media de la mañana. Despertamos y luego de ducharnos y cambiarnos cada una, nos pusimos a terminar de empacar todo. A eso de las diez de la mañana bajaron al lobby del hotel donde hicieron todo el proceso del checkout. Un uber las acercó al aeropuerto y allí en un café desayunaron algo.

Y entonces a eso de las doce del medio día ya se estaban subiendo al avión.

@paulasofiaa vía instagram story:

Apagué mi teléfono y me acurruqué en el hombro de Sira para ver la película que estaba viendo ella

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.



Apagué mi teléfono y me acurruqué en el hombro de Sira para ver la película que estaba viendo ella. El viaje fue bastante tranquilo, entre ver Corazones Malheridos con mi prima y dormir quedé un poco desconcertada al darme cuenta que ya había llegado a Barcelona.

Como siempre hicimos todo el procedimiento que conlleva llegar a un aeropuerto y salimos en busca de mi primo Pacho que nos recogería.

- Pensé que no llegarían nunca.  -nos saluda a las tres y nos ayuda con nuestras cosas-  ¿La pasaron bien?

- De maravilla.  -contesta mi hermana subiéndose al auto-

- Fue todo muy lindo, deberíamos ir la próxima vez todos, incluyéndote a ti y a Nico.  -dice Sira a su hermano-

- ¿Y tú Paula? ¿Qué tal?

- Bien.  -digo y suelto un gran bostezo después- Perdón.

- Ya veo.  -se ríe-  Vamos a casa, mamá ha hecho lasaña.

Una hora después habíamos llegado a lo que fue mi casa hasta hace casi cuatro meses. Entramos con todas nuestras cosas y mis tíos nos recibieron.

- Hola, mis niñas hermosas. ¿Qué tal el viaje?  -pregunta mi tía, todas nos acercamos a saludar y luego nos acercamos a saludar a mi tío-

- Súper bien tía. Italia es precioso.  -dice Dania-

- Hola Paula.  -me saluda mi tío, yo no me había acercado mucho, pues no había hablado con él desde que pasó aquello-

- Hola.  -me limito a decir por lo bajo-

- Ven acá hija mía.  -me atrajo hasta él envolviéndome en un abrazo-  Te hemos extrañado mucho por aquí.  -da un pequeño beso en mi cabeza y yo hago más fuerte el agarre del abrazo-

La realidad es que yo los extrañaba muchísimo también. No les había hablado pues me daba mucha vergüenza el hecho de que supieran acerca de la situación y me daba miedo saber que pudiesen verme como una zorra.

- La cena ya está lista. ¿Vienen?  -dice mi tía desde el umbral que daba hasta la cocina-

Todos nos dirigimos hasta el comedor donde mi tía ya estaba sirviendo los pedazos de lasaña. Comimos entre anécdotas del viaje y preguntas acerca de cómo me estaba yendo durante este tiempo. Al terminar de cenar nos dirigimos al salón donde nos sentamos y repartimos algunos de los regalos que habíamos comprado.

LLYLM  ||  Pedri González // Ferran Torres Donde viven las historias. Descúbrelo ahora