capítulo II

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La primera cena.

Diana 🍁

Esta tarde me la pasé en mi cuarto, no quería salir de mi espacio seguro.

Quizás suene raro, pero necesitaba una pausa.

Estuve todas las horas leyendo y cuando sentí qué ya era demasiado tiempo cruze la puerta de mi cuato y me dirigí casi corriendo (corriendo) al baño que estaba al final del pasillo.

Me duché lo más lento posible, en serio nunca tardé tanto tiempo en pasar champú y  acondicionador en mi cabello, prestando atención a cada mechón castaño que mi cabeza poseía.

Al salir me puse un pantalón chándal negro y  una remera de tirantes blanca que dejaba a la vista mi sujetador.

Luego me dispuse a continuar con mi lectura actual hasta que el sueño me abrace por completo.

Lo que no tuve en cuenta fue a mi padre, que llamó a la puerta.

- Hey, vamos a cenar -
Pronunció con media cabeza dentro de mi cuarto, cómo si fuera cosa de todos los dias cenar en familia.

Por lo general mi padre y yo no cenabamos.
o sea NUNCA cenábamos juntos.
Él siempre llega muy tarde a la casa del trabajo.
Nunca pensé que podría llegar a ser diferente.

Mi padre me dejó sola en mi cuarto sin siquiera dejarme responder.
Antes de salir me puse mi hoddie rosa con la estampa de Lover el álbum de taylor swift y unas converse.

Muy estético de mi parte, tendría qué ser  parte de  Project Runway, seguro gano.

Baje al salón y estaba mi padre en un extremo de la mesa, al lado de él Elena.
Olivia estaba sentada frente a ellos y a su lado había una silla vacía.

Genial.

La mesa estaba llena de comida saludable.
¿Que esta pasando?

Siempre que comíamos en casa, lo hacíamos en la cocina y  era algo bastante grasoso  y para nada nutritivo.
No me quejo, mi papá y yo no  sabemos cocinar, así qué lo que comíamos habitualmente es delivery.

- Sientate Diana- dijo una sonriente Elena, rompiendo la burbuja de mis pensamientos.

Olivia da palmaditas al asiento que esta a su lado para que me siente,
mire extrañada, tampoco tenia otra opción, así que me senté.

Comenzamos a comer y un silencio sepulcral inundó el salón.

- Que lindos tatuajes Kar - Carraspeo mi padre.
- Gracias, la mayoría los diseñé yo- Sonrío orgullosamente.
Podría jurar que su pecho se elevó.

- Que bueno - sentenció el gran hombre.

Reí por lo bajo y Elena lo notó.
- ¿Qué pasa Diana? - indagó ella.
- Mi padre odia los tatuajes -.
Y antes de poder continuar el se atajó.
- No es cierto, sólo... no me gustan en ti -.
Ahora es Olivia quién ríe.

- tranquila Diana, cuando tengas edad yo misma me encargaré de hacerte un tauaje-.

La miré con recelo, puedo sentir la ironía en sus palabras y la condescendencia de sus actos, como mueve su pelo rubio de un lado a otro, cómo si fuera superior al resto de los mortales.
No la soporto.

¿Cómo puedo mostrar mi desagrado?

ding  ding  ding. Si! Adivinaste!
Rodando los ojos.

- Quién es tatuadora a los 19 años  de todas formas es súper extraño, jamás dejaría que me hagas un tatuaje.
seguro tu trabajo es super mediocre-.

Los ojos de Olivia (LGBTQ+)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora