SUYO, MÍO ⌲ jinx • joo jaekyung × kim dan

01: ⸺serendipia

Principe de lágrimas;
llanto en tus ojos, dolor en tus labios
y muerte en tu esperanza.
Pobre principe de Nunca Jamás, llorando te pasas los días y llorando morirás.
De dolor te levantas y de dolor duermes,
realidad en tu mente y hielo en tu corazón.
De traición vive la pena y de confianza muere el creyente.

( ♡ )

Jaekyung es invencible bajo cualquier punto de vista. Su fuerza y condición físicas son literalmente sobrehumanas, mientras que mantuvo una disciplina recta a lo largo de sus veintiseis años de vida, lo que no hizo más que nutrirlo de experiencia y hambre de gloria. No hay manera alguna de que alguien pueda derrotarlo considerando sus dotes y su trayectoria. Se necesitaría alguien igual o mejor que él en cuanto a técnicas, experiencia, fuerza y dominio para intentar derrotarlo, ningún hombre común podía, y para suerte de Joo, está rodeado de hombres comunes.

Y sin embargo, incluso cuando casi mensualmente se encontraba en peleas que se supone debían mostrar el máximo poder que un hombre puede tener, Jaekyung está aburrido de todos ellos. Está aburrido de buscar personas extraordinarias que pudieran hacer su vida un poco menos monótona. Porque ama aplastarlos, humillarlos y acabar con cualquier destello de 'vida' en sus ojos, pero antes de ese ritual, trata de buscar un brillo que pudiera cautivarlo, algo diferente... alguna serendipia que pudiera crear una diferencia.

Erróneamente, creyó que sus contrincantes serían los indicados. Pero noche tras noche, pelea tras pelea, lo único que logra darle vida de sus cuerpos inertes es su sangre derramada en el ring y la victoria en sus hombros. Con el tiempo dejaron de sorprenderlo. Todos, absolutamente todos eran lo mismo; no más que bolsas llenas de huesos y carne.

Resignado, busca el placer en mujeres que no hacen más que aburrirlo con el pasar de las noches; sus cuerpos y mentes eran frágiles, y él repudia la fragilidad. Tocarla, convivir con ella. 'Frágil' y 'débil' son sinónimos. La muerte ha estado cerca de los débiles por años, son ellos los reprimidos y en general se siente como una enfermedad contagiosa y mortal, por lo cual trata de evitar por completo esa plaga.

Sin embargo, ahora a minutos de conocer al siguiente hombre desdichado con el cual se enfrentaría, acababa de encontrar lo que tanto buscaba. Completamente fascinado con la imagen exacta de la fragilidad, lo observa a la distancia, cada pequeño movimiento de su cuerpo se mostraba ante sus ojos con brillo. Es delicado, pero unos enormes brazos propios de un luchador se apoyaban en esos hombros delgados, envolviendo aquel delgado cuello de cisne, sirviéndole de collar. Hace palpitarsu corazón, sentir una emoción nueva, diferente. 

La fragilidad en brazos de un extraño.

La belleza en ojos de la muerte. 

Por más contradictorio que pueda llegar a sonar, Jaekyung lo anhela. Se siente atraido hacia esa persona, hacia la viva imagen de un ser vulnerable. Quiere poseerlo, llenarlo y romperlo. Sorprendentemente, aquello que creía despreciar es lo mismo que llega a cautivarlo en ese momento.

No se siente como una coincidencia, se siente como un momento predestinado.

El chico se ve como suyo, su piel pálida, su cabello marrón y su postura nerviosa; todo se ve como algo que le perteneció desde siempre.

Jaekyung lo quiere...

Jaekyung lo obtendrá.

( • • • )

En el cara a cara, se permite analizar detalladamente a la persona con la cual va a enfrentarse. Su edad no debía pasar los veinticinco y medía unos tres o cuatro centimetros menos que él, su cabello era negro y completamente corto, como el corte común de un militar coreano, su rostro expresaba cierta tristeza o preocupación bastante bien camuflada; él estaba acostumbrado a ver ese tipo de expresiones en sus contrincantes.