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La fémina de cabellos dorados caminaba por las calles de Corea buscando su tienda favorita de zapatos, había un súper descuento y ella no podía perderlo.
—¡Ash!, Odio caminar, me duelen los pies—se quejaba mientras tomaba un sorbo de su café.
Siguió caminando hasta llegar a la tienda. Era tarde la tienda estaba llena de mujeres salvajes por las ofertas.
La rubia reconoció a cierta pelilila que caminaba buscando algo o alguien. Le resto importancia y se dirija nuevamente a su hogar.
—Ese chico—señalo con una mano mientras con la otra sostenía su café.
Sacó su móvil para abrir su chat con el contacto de Hiroshi. Observo la foto y observo al chico que estaba sentado en aquella banca y coincidían.
Se acercó posicionándose delante de él.
—Disculpa, ¿Tú eres Miyamura Izumi?.—preguntó aquella fémina muy amable
—Si, soy yo—respondió de igual manera aquel chico.
—Me presento, soy Kim Mi-suk.—dijo con una sonrisa muy grande en sus labios.
—Un gusto, Soy Miyamura Izumi, no quiero ser grosero pero, ¿De dónde me conoce?—preguntó tratando de sonar lo más respetuoso posible
—Oh si, digamos que tengo un primo en Japón, Suzuki Hiroshi, y me habló muy bien de tí y de sus amigos, envío una foto, la vi y como tengo muy buena memoria lo recordé en cuanto te vi—dejo soltar una carcajada muy sutil
—Ohh, entonces por Suzuki me conoce, es un gusto, Señorita Suzuki—Se levanto para hacer una reverencia
—No es necesario tanta formalidad, Llámame Mi-suk, yo no llevo el apellido Suzuki, ese es el apellido de mi madre yo soy Kim—aclaro
—Lo siento señorita Kim—volvió hacer una reverencia
—No es necesario, Hiroshi también me hablo de __________ Tanaka, conocí a Tanka por la universidad, ¿Ustedes aún siguen juntos?—solto una pregunta directa
—Bu-bueno—apretó su mandíbula para controlar el temblor de sus labios—De hecho no, nos separamos pero aún seguimos siendo amigos—le dió una sonrisa
—Oh ya veo—posicionó su dedo índice en su mejilla pensando—Lo siento si fui entrometida, solo que me me pareció una bonita relación que quise saber
