INTRODUCCION

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Es complicado pensar en cómo habían llegado a este punto, porque ambos nunca creyeron qué algo así les fuera a ocurrir, al menos no a ellos...

Sin embargo aquí estaban, sus corazones gritando, sus ojos lloviendo y sus cuerpos temblando ante la impotencia de no saber que hacer para cambiar la situación por algo mejor. Sin pensar en que más decir aziraphale exclamó - Creo que no entiendes lo que te ofrezco-

-Claro que si, creo que lo entiendo mejor que tu- Crowley no sabía cómo hacerle ver al ángel que le estaba pidiendo una completa locura.

-Bien entonces es todo- aziraphale peleaba por contener lo cortado de su voz con cada palabra que decía.

- Escucha... ¿Lo oyes?- dijo crowley para completa confusión de aziraphale.

-¡N-no! No escucho nada...

- Exacto!... No cantan los ruiseñores...- aún con sus lentes se podía notar el dolor en su mira al ver a aziraphale- ERES UN IDIOTA... Pudimos ser nosotros...

Crowley no soporto ver como aziraphale le desviaba la mirada y sin nada más que perder fue a él, tomandolo por la parte superior de su traje atrayendolo a un beso... Un beso profundo con el que esperaba poder transmitir todos sus sentimientos a él ángel, un beso qué más que amor era su último recurso, una última suplica por que su ángel se quedará a su lado, que por primera vez lo eligiera a él.

Aziraphale se quedo congelado, vulnerable, al ser superado por la acción del demonio, sin quererlo apartar pero tampoco saber como responder a tal movimiento lo toco levemente.

Ambos cerraban sus ojos con fuerza siguendo el beso qué era un mezcolanza de sentimientos y emociones que habían contenido hasta el momento, con lágrimas en el borde de sus ojos, se separaron de aquel beso qué por tantos años ambos habían anhelado en secreto el cual lamentablemente no fue como debió ocurrir así.

Ahí estaba aziraphale agitado con la voz temblorosa y quebrada, no sabía exactamente que decir su mente estaba perdida, su cuerpo acelerado, lo único que atinó a decir fue- Y-yo... Te a.- te perdón...-

-No te molestes...- crowley salió de la librería rápidamente cruzando la calle sin cuidado, al llegar a su bentley se derrumbó entonces todas las lágrimas qué contuvo dentro empezaron a escapar por más que tratará de contenerlas no podía, ya no. Se perdió en si mismo llorando "no de nuevo" ángel su amado ángel había vuelto a elegir el cielo sintiéndose completamente ridículo por pensar que sería diferente esta vez, se quedó sollozando hasta que vio como aziraphale salía de la librería junto a metatron.

En la biblioteca aziraphale seguía tratando de procesar lo que acababa de ocurrir, tocando sus labios qué seguían húmedos por el reciente contacto con los de su querido demonio finalmente crowley lo había besado, su mente viajaba rápido por un sin fin de dudas sin respuesta, pero se vio obligado a reponerse rápido pues no pensaba verse así en presencia de metatron. Salió de ahí a su lado con una aparente seguridad que se vio interrumpida en cuanto vio a crowley afuera "¿será buena idea?" pensó por un momento, claro que lo era ¿no? El cambiaría las cosas.

Dándose ambos una última mirada aziraphale se quedo congelado por un instante al ver al crowley recargado en el bentley como esperando, como esperandolo a él, pero se alejo con un último suspiro subió al ascensor al lado de metatron.

Y una vez más... estaban lejos...

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