Era un atardecer muy bonito, Twilight miraba el atardecer desde la ventana de su habitación, y luego, cuando pensó en Flash, suspiró hondo.
Spike entrando a la habitación: Twilight, todo bien?
Twilight no volteó a ver a Spike. No quería ver a nadie.
Twilight: No Spike. Nada está bien.
Spike preocupado: Twilight, qué tienes?
Twilight: Hice algo que jamás debí haber hecho.
Spike confundido: A qué te refieres?
Twilight: Tuve una pelea seria con Flash. Él debe irse mañana temprano a las fuerzas armadas de la guerra. Y como es soldado, puede morir. Le dije que eso no estaba bien, ya que en unos meses nos casaríamos, pero me juró que saldrá con vida y volverá para casarnos y ser felices. Pero nadie tiene la vida comprada, y le dije que prefiere su título y su puesto que a mí. Entonces comenzamos a discutir, pero el se enojó y ahora mañana se irá y tengo miedo de que algo malo pase.
Spike: Tranquila Twilight. Todo estará bien.
Por la mañana siguiente...
Twilight llorando: Flash por favor no te vayas!! Te amo y quién sabe qué podría pasarte.
Flash: Tranquila Twily. Volveré, y a tiempo para nuestra boda.
Ambos se besaron, en eso el conductor comenzó a mover el tren para marcharse, Flash abraza rápidamente a Twilight, corre y sube al tren.
Twilight se despide con su casco, y lo ve cómo lentamente va desapareciendo Flash hasta no verse.
Twilight triste regresa lentamente a su hogar.
Meses después...
Twilight no veía a Flash y supuetamente en este mes el debía de regresar, lo cual no había noticias de él, y cada vez tenía más miedo que algo le pase.
Spike llega corriendo hasta Twilight con un diario en la mano.
Spike: Twilight, leí las noticias. Y en la guerra, han muerto más de 5.000 soldados.
Twilight comenzó a temblar y comenzó a debilitarse, sentía de que no vería nunca más a Flash.
Spike: Twilight, todo estará bien. Hoy regresa Flash en el tren. Estoy seguro de que regresará.
Pasaron las horas, y era tiempo de ir a la estación de tren a recibir a Flash luego de tanto tiempo sin verlo. Twilight comenzó a temblar a darse cuenta de que era hora. Corrió, salió de su castillo y corrió con todas sus fuerzas, era tiempo de descubir la verdad. Flash le había hecho una promesa: Regresaría, y justo a tiempo para casarse. Twilight corrió aún más rápido al ver que el tren llegaba. Comenzaron a bajarse muchos ponis. Twilight temblando y preocupada, buscaba a Flash por todas partes, pero no lo veía. Poco a poco, todos los ponis se fueron y quedaban muy pocos a la vista. Twilight rendida, comenzó a llorar desconsolada, ya no tenía esperanza. De pronto, vió bajar a un poni anaranjado con melena azul. Tenía algunas heridas y su rostro estaba cansado. Al instante lo reconoció, era Flash.
Ambos se miraron, el rostro de Flash se llenó de alegría, corrió al igual que Twilight, y ambos se abrazaron, y ambos lloraban de felicidad.
Twilight llorando: Creí que te había perdido. Te he extrañado tanto...
Flash: Ya estoy aquí... Ya podemos ser felices.
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