Sigo dando vueltas en mi mente, adentrada hasta lo más profundo de una ensoñación que se roba mi tiempo, sueño y emoción.
La costumbre me impide estar presente en mi propia realidad, los romances imposibles, las victorias frecuentes y los poderes sobrehumanos me deslumbran sin consideración alguna.
Las fantasías de un nuevo mundo me arrastran y nublan la belleza del aquí y ahora.
.
.
.
.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
