Capítulo 8
-Y bien?...
-A dicho que vendría para llevarse a alguien, pero no dijo a quién.
-Soy yo. ¿No es asi?
-Lo más probable es que asi sea, pero no podemos sacar conclusiones antes de tiempo. – Se quedo callada el resto de la noche.
Es tastábamos sentadas una frente a la otra en la barra que hay en la cocina, la luz tenue de la única luz prendida en la casa inundaba la habitación haciendo un ambiento algo sombrío.
Mi madre no dijo nada mas durante la cena, y cuando terminamos levantamos los trastos entre las dos, habia un silencio entre ambas donde se sentía el miedo, enojo y preocupación al mismo tiempo. De repente un ruido rompió el silencio, alguien habia tocado a la puerta, quien podria ser a esta hora. Únicamente nos volteamos a ver una a la otra y ella hizo un gesto de que me quedara ahí mientras se dirigía a la puerta lentamente.
Yo estaba mirando desde el marco de la cocina como mi madre observaba por la mirilla y se quedaba inmóvil sin abrir, hasta que la puerta volvio a soñar y se escucho una voz desde fuera.
-Se que Yara está aquí, déjame hablar con ella. -Un escalofrió recorrió mi cuerpo, conocía esa voz.
Ella me volteo a ver a lo que yo asentí con la cabeza y vi como la puerta se abría lentamente.
Era mi padre, despues de tantos años decidió reaparecer y despues de lo que mi madre me conto sabia a que venía, y venia por una sola razon. Llevarme con él.
-Hola cariño. -Dijo mi padre parado en el marco de la puerta.
Me ele al instante no crei volver a verlo, al menos no ahora, ¿Por qué ahora?
-Hola. -La voz se me corta y apenas puedo hablar.
- ¿Podemos hablar? – Pregunta el a lo que mi madre le da paso a la sala.
Los tres estamos en la sala en silencio esperando a que alguno diga la primer palabra, no pasaron ni un par de minutos y la tensión ya se sentía, un ambiente lúgubre, veo la preocupación en la cara de mi madre y los nervios en mi padre aunque realmente se veia tranquilo.
Yo no sabia como sentirme realmente y antes de que pudiera pensar algo mi madre voltea a verme y pregunta.
-Entonces, ¿Qué haces aquí?
-Vengo a hablar con ustedes sobre algo importante, como todos sabemos ya, Yara va a cumplir 18 en un año exacto. -Antes de que pudiera continuar mi madre lo interrumpe.
- ¿Y viniste solo a decir eso?, llegaste tres dias tarde. -Dice ella en un tono despectivo.
-No vengo solo por un día, vengo por un año, vengo a quedarme. -El silencio inundo la casa.
-Debes estar bromeando, no puedes, no vas a hacer eso, no lo voy a permitir. -Su tono ahora suena enojado y preocupado, yo únicamente estaba parada sin decir nada.
Te ha comido la lengua el gato eh yara.
-Vamos no hagamos esto mas dificil. Únicamente quiero pasar tiempo de calidad con Yara antes de que sea tarde y ella se valla a la universidad.
-Eso lo debiste haber pensado hace años, y ni creas que voy a dejar quedarte despues de todo lo que ha pasado. -Ahora su tono es firme.
-Entonces déjame llevarla conmigo por el año que queda.
-Que! Estas loco si crees que dejare que te la lleves.
El se levanta del sofá y camina hacia mi madre y cuando queda frente a ella le susurra algo que no logro oír, la cara de ella ni se inmuta, pero noto sus manos tensarse. El se aleja y se dirige hacia la puerta, cuando pasa enfrente de mi se detiene un momento. -Piénsalo bien. Vengo en son de paz. -Y sigue su camino hacia la puerta, finalmente sale, la situacion se ha vuelto preocupante. Ya en mi cuarto decido llamar a Marcos, no lleva ni dos dias fuera y esto pasa.
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Metanoia
Teen FictionYara intenta disfrutar su último año de preparatoria pero todo cambiará muy rápidamente con la llegada y regreso de ciertas personas a su vida, la cual cambiará drasticamente en cuestión de semanas, cambios para los que ella no está preparada. PD:La...