Narra Ai.
Mi infancia no fue como la de los demás.
Éramos muy pobres, y mi madre amaba a los hombres y odiaba a las mujeres, eso me incluye a mi.
- Mamá, ¿tengo hambre?.- Dijo una pequeña Ai jalando la ropa de una mujer con ropa muy provocativa.
- ¡¡No molestes!!.- Exclamó la madre de Ai molesta.- ¡¡Hay arroz blanco de ayer en la cocina, caliéntatelo y déjame en paz!!.- Grito fastidiada empujando a la niña, mientras se maquillaba.
- Pero........no sé cómo.- Dijo Ai asustada mientras se levantaba.
- ¡¡¡Mocosa inútil!!!.- Grito la madre de Ai furiosa y se acercó a la cocina, calentó el arroz, pero por hacer todo con coraje rompió algunos platos, y algunos de esos pedazos cayeron en el arroz.- ¡¡¡Come y vete a tu cuarto!!!.
Ai tomo su plato con miedo y se fue a su habitación para no molestar a su madre.
Pero cuando comí el arroz, también comí los pedazos de platos rotos, empezó a tener un fuerte dolor de estómago.
Le suplique a mi madre que me llevará al hospital, pero me ignoraba.
Pude ver la satisfacción de mi madre al verme sufrir, pero su novio que vino a casa me llevo al hospital, sin embargo.....
Todo eso tenía un precio......
El abuso de mi, según el tenía que pagar por los gastos médicos que el pago.
Desde ese día no puedo comer arroz blanco.
El abuso se volvió cosa de rutina.
Mi madre empezó a odiarme más al ver que su hombre le interesaba estar más conmigo que con ella.
Durante los últimos 3 años, fueron golpes, gritos y abusó.
Durante ese tiempo ya no me importaba arreglarme, empecé a pelear en las calles, y para poder tener mi propio dinero y alejarme de mi mamá, empecé a..........
Prostituirme, a robar y estafar.
El novio de mi madre cuando se dio cuenta que no volvía a casa, decidió abandonarla, parece que lo único que lo ataba a nosotras es que yo esté dispuesta para el. Y como el era nuestra fuente de dinero, cuando se fue, mi madre también.
Cómo tenía 10 años me pusieron en varias casas de acogida, pero nunca me lleve bien con nadie, tenía una mirada fría e inexpresiva.
Muchos veces me metí en problemas, peleas y discusiones, pero......Me dolía, nadie se molestaba en acercarse a mi con buenas intenciones.
Muchos se burlaban de mi.
Nadie me quería.....
Cuando cumplí 12.....el presidente se acercó a mi para reclutarme como Idol.
Fue la primera persona que me trató como una persona normal en toda mi vida, pese a que intenté asustarlo con mi verdadera forma de ser, el no retrocedió, pero siguió siendo amable conmigo, aún así no me interesaba ser Idol.
Pero era tentador ser Idol, ser amada por la gente es algo que siempre quise, pero para que me amén tendría que decir que los amó, algo que no que se sentía, y como la Idols son seres que aman a su fans, no se si podía, así que rechace la oferta.
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Los deseos de Muchos
Fanfiction¿Soy el más suertudo o el más desafortunado?, nunca me he detenido a pensarlo. Hace no mucho vi un buen anime, Oshi no Ko, dónde te muestra lo cruel y duro del mundo del espectáculo japonés, pese ser un Universitario sobre explotado de tantos en lo...