Ya era el ultimo día de clases, ya que vendrían las vacaciones de marzo/abril.
Todo iba normal;
Al llegar a mi casa, vi una tristeza profunda en los ojos de mi madre. Mis padres no me decían nada, solo que iriamos de visita a ...........
Aunque quería ir, sabia que no era buena idea, que no eran por las vacaciones.
Al llegar, solo vi a familiares muy tristes y lloraban como si alguien o algo se hubiera ido, aún no entendía nada y eso me asustaba.
Pocos minutos después mi madre me explicó lo que sucedía
-kate, tu abue se ha ido a un lugar mucho mejor, ella ahora es tu ángel.
-no es cierto-le respondí incrédula.
-lo siento hija
Me abrazó por un largo rato, y después fue a ver a mis hermanas para explicarles tambien.
Yo solo pensaba y pensaba, aun no creía eso, no es verdad¡.
Había perdido a la persona que creía en mi, cada momento de mi vida estuvo ahí, alientándome, siguiendo y ayudandome a conseguir mis sueños. Ahora ya no estaba aquí, seria mi ángel guardián, y aunque no estaría a mi lado físicamente, la llevaría conmigo en mi corazon, siguiendo sus consejos. La verdad no sabia como seguir sin ella, tendría que averiguarlo sola y seria un gran reto para mi.
Me hacia tantas preguntas, pero ninguna tenia respuesta, era como si la vida no tuviera sentido como si el amanecer no tuviera sol.
Mi abue siempre decía: "a veces pensamos que perdemos pero no es así, ganamos algo que jamas podríamos imaginar"
Ella tenía razon, yo la había perdido pero gane a un ángel guardián.
