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Atenea
Mama? -
preguntó con vos extrañada tras coger la llamada
Atenea, hija, qué tal?-
me pregunta mi madre, ¿alegre?
Mama que pasa, por qué me llamas?-
Ahora no puedo hablar ni con mi hija?-
me pregunta indignada
Soy tu hija cuando quieres-
le digo en español, ya que sé que no se va a enterar
Que no digas cosas en español que no me entero-
Mama que quieres, no tengo mucho tiempo, tengo que ir a entrenar-
le digo ya empezando a molestarme, no me habla desde navidad y viene ahora a hablarme como si nada.
Pues que tienes que venir a casa en menos de una semana -
¿Cómo que a casa?-
le pregunto extrañada
Hay hija, pues aquí a casa con tu familia-
me dice mi madre como si fuera lo más lógico del mundo. Pero comprenderme esa dejo de ser mi casa hace 4 años y desde entonces no la he vuelto a ver.
Mama no voy a ir, todavía no he terminado la temporada y me tienen que dar las notas de clase-
le digo intentando poner las mejores excusas para no tener que ir.
Vienes y punto. Me he informado y sé que tienes el último partido mañana, y las notas ya te las dieron. A su que el lunes coges el primer vuelo que sale, te envío ahora los billetes. Y solo te digo que como vaya a recogerte al Aeropuerto y no estés día adiós a tu sueño de ser futbolista conocida- me dice ella para después colgar.
¡JODER!-
grito tirando el móvil contra el sofá.
Que pasa tía, estás bien-
me pregunta mi amiga
El lunes vuelvo a Los ángeles-
le digo en voz baja intentando asimilarlo.

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Narrador

Han pasado 2 horas desde que Atenea se enteró de que tendrá que ir obligada a Los ángeles después de 4 años.
Tras asimilar todo un poco.

Cogió sus botas y se fue al campo donde entrena con el equipo de fútbol.
Al llegar no saludo a nadie, solo se sentó, se puso sus botas y empezó a hacer la única cosa donde se siente feliz y libre. Jugar a fútbol
Al terminar de entrenar coge si móvil, el vuelo tiene una notificación. El cual contenía los billetes de avión que su madre le había dicho esa mañana que le enviaría.
Pero lo, pero fue cuando leyó que el billete de regreso no sería hasta septiembre. Lágrimas empezaron a correr por sus ojos, pero no eran de tristeza, sino de impotencia de saber que si hacía lo contrario a lo que la madre me decía podría ser el fin de su carrera como futbolista. Ya que ella seguía siendo menor de edad. En su mente solo pasaba la idea de volver a ver a su hermano, el cual nunca le hacía caso a su hermana. Y lo peor de ver a su hermana, esa que siempre le hizo sentir menos, la que siempre se encargaba de recordarle que todos la preferían a ella. Quizás piensen que es una rencorosa y que sigue molesta por qué en su niñez siempre le hicieron sentir menos. Pero lo que más le dolía era que en todos estos años no había recibido un mísero 'hola' por parte de sus hermanos.

Al ver que no quedaba casi nadie en el campo se dirigió al vestuario a ducharse y cambiarse de ropa, al terminar cogió de su mochila sus cascos, para continuación darle play a su playlist mientras iba caminando al centro comercial donde había quedado para comer con unos amigos.

Una sonrisa se puso en su boca cuando empezó a sonar "vista al mar" de Quevedo.
Aunque ella lo solía llamar Pedrito cada vez que lo ve

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Holaaaa, que os parece el tipo de letra para cuando hay conversación ?

Quién creéis que son los amigos con los que va a ir a comer ???

Espero que le haya gustado 🤍

Mi verano más realDonde viven las historias. Descúbrelo ahora