Después de seis meses de idear la trama, ¡este libro finalmente está listo! :D
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El cielo nocturno que se extendía sobre la zona era lo suficientemente oscuro como para indicarles que el sol no iba a salir pronto.
El humo del fuego, los escombros de los edificios y las llamas de la conflagración se mezclaban en la oscuridad de la noche, haciéndola aterradora.
Pero para él, para el chico que estaba allí observando, había algo aún más aterrador en lo que preocuparse...
La sangre de sus camaradas, los gritos de quienes intentaban luchar por sus vidas y... Y lo más horrible de todo; la risa del enemigo.
Ejiro Kirishima no podía procesar la situación.
'¿Cómo llegué aquí...?'
Miró el caos. Se sentía débil.
'¿Cómo sucedió esto...?'
Miró a los Héroes heridos en el suelo. Se sentía culpable.
'¿Cómo pude permitir que esto sucediera...?'
Miró sus propias manos. Las lágrimas empezaron a formarse en la esquina de sus ojos.
"Se suponía que debía protegerlos... Cuidar de ellos... Entonces, ¿cómo..."
Apretó los puños y giró la cabeza consternado.
Los comunicadores tampoco estaban funcionando bien. Las señales estaban bloqueadas. Dios sabe qué le pasó a Shinso, ya que era el encargado de la comunicación y las direcciones de enrutamiento. Sabían que era débil cuando se trataba de combate cuerpo a cuerpo, por lo que le dieron esa posición. Pero ahora, el chico pelirrojo solo podía rezar por su seguridad.
De todos modos, Kirishima no podía pedir refuerzos, aunque quedara alguien. No podía llamar a alguien para recibir apoyo médico. No podía preguntar sobre el resto de sus amigos. ¿Dónde estaban? ¿Estaban bien? ¿Necesitaban su ayuda?
No podía hacer nada... No podía hacer absolutamente nada...
Se sentía impotente.
Se sentía inútil.
Se sentía patético.
Se sentía como un fracaso.
Le habían dado una tarea. Una sola cosa que hacer. Y falló. No pudo hacerlo.
Entonces lo vio...
Ahí lo vio...
"¿Midoriya...?" Llamó al chico de cabello verde en estado de shock, parado en la dirección opuesta a él.
Lo primero que vino a la mente de Kirishima después de ver al chico fue; muerte.
Por otro lado, el chico de cabello verde, al igual que todos los demás, también parecía golpeado. Claramente tenía múltiples heridas, pero su postura las ocultaba bien. Apenas se mantenía erguido, pero había una pequeña y loca sonrisa en su rostro mientras miraba al otro chico.
Pero había algo en sus ojos esmeralda que asustaba a Kirishima...
Esa palabra resonó en sus oídos una y otra vez;
Muerte. Muerte. Muerte. Muerte. Muerte...
"No me digas... M-Midoriya, tú... Tú... ¿Cómo? No... No. No. No." Kirishima quería negarlo, y lo hizo.
Y entonces, Midoriya sonrió ampliamente.
Dios, este día no podía empeorar más para ellos.
Kirishima había tenido un horrible sueño que parecía tan real. Como si fuera una visión.
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B O U N D
Fanfiction"Por lo general, desprecio a todos los que interfieren en mi trabajo. Pero hay aquellos a quienes desprecio aún más. Aquellos que simplemente no morirán. No importa lo que hagas, cuánto los rompas, los mates, siempre vuelven." "Bueno, ya somos dos."...
