「ꕤ CURSE┊ Meliodas」
Nanatsu no taizai fanfiction. ⸙ 🏵️ 人
❛donde dos almas enamoradas se vuelven a juntar por culpa de una maldición ❜
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Dalila Escobar es una latinoamericana de dieciocho años que vive junto su mad...
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Capitulo ෆ diecinueve ━━━━━🐲🌪️🍻 ¿quien son lia y liz?
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Pasaron varias semanas luego de aquel incidente dónde todos se dieron cuenta que me llegó el periodo— de tanto que pensaba en ella hizo que la manifestará, salí bruja viste—y dados los sucesos anteriores debimos estar bajo perfil porque los caballos sacros andan más ladillosos que nunca.
Porqué, ¿A qué no saben la última, mi gente? Los gafos er coño nos echaron la culpa de la muerte de Verónica —la cabeza de tazón y hermana mayor de Elizabeth— que hicieron un comunicado y subieron el precio de nuestras cabezas, en especial la de Meliodas.
Es que no debería llamarse Meliodas, el pecado de la ira, si no mejor Meliodas, el pescado de la ira porque este ser está más salao' que cuca de sirena, hermana.
Nunca pensé encontrar a alguien más salao' que mí.
En estos momentos nos encontrábamos en la sala desayunando mientras Diane dormía luego de estar casi toda la noche caminando.
Pobrecita mi nena.
— Gracias por la comida.
— Estuvo muy rico, gracias — agradeció el castaño rojizo con pena dejando su plato vacío a mi lado.
Le di un sorbo a mi taza de café con diseño de gato (taza que obligué al umpalumpa de Meliodas a comprarme) y le pase mi plato a Ban con mi último trozo de humita.
El larguirucho tomo el plato con rapidez dispuesto a comerse la masita hecha de choclo y queso que prepare con un expresión de felicidad en su afiliado rostro.
Por inercia sonreí al verlo tan contento por mi comida.
— Muy bien, ¿Y que hacemos con el asunto de los caballeros?
— Nos cayó la ley, muchachos — comenté terminando de tomar mi cafecito.
— Ya estuvimos mucho tiempo escondidos, debemos seguir buscando a los demás pecados capitales — nos informó Meliodas cruzando los brazos—. Así que ustedes se encargarán de la comida — señaló Ban y a King, estos hicieron un mueca saliendo de la taberna—. Dalila, Elizabeth...— ambas miramos con intriga al rubio—... Necesito que promocionen la taberna en el mercado y de paso consiguen algunas hierbas en el bosque.
