Poema 20: A mi yo de ayer

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Contigo aprendí a darme cuenta de mi vida, deje de ser un barco sin rumbo, que estaba a la deriva y comencé a abrir las velas en dirección a mi mismo.

Te vi y compartimos muchas cosas, pero somos muy diferentes, nos llamamos igual, pero nos dimos cuenta que no solo es un gesto o una flor.
de

De una platica a la otra comprendimos nuestro nombre quienes somos, de donde venimos, que nos espera y que compartimos.

Pero, siempre tiene que haber un pero. El equilibrio del universo nos mostró que hay que bajar para subir, y viceversa en olas de los sentimientos

Que a veces simplemente un silencio significa gracias por este hermoso momento.

Gracias por esta escapada de la realidad. O gracias por este encuentro con el pasado de la realidad que tan distante me ha quedado.

100 Poemas para dedicar en una realidad absurda como la nuestraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora