Sin Tu Mirada// Spruan>~<

En otra dimensión<><>

Hola!! Anoche cuando me iba a dormir, me empecé a crear una historia, bien pinche rara, y me pregunte porq no ponerla acá. Asi qué disfruten el cap (les juro que es importante para el lore)

.~♡~.

Este despertaría, como su día a día, un clima perfecto para hacer estupideces, pues estaba nublado, sin lloviznas, Todo tranquilo en la isla quesadilla.

Este fue a la casa de su amigo, pues habían quedado en poner varias bombas en casa de los habitantes de allí.

Todo paso muy rápido, y cuando menos se lo espero ya había llegado a la casa dd su amigo, ni si quiera sabía como había llegado tan rápido, pero aún así, se sentía feliz.

–¿Qué ondaa??– dijo alargando la "a" al final.

–Hola, todo bien, ¿y vos?

–Pues, uno qué otro problema por aquí otro por allá, pero fuera de eso todo tranqui.

–Bueh, mucho show.

–si un poco.

–Qué decis, ¿vamos primero a la casa de?

–¿Qué te parece a la de Quackity?

–Ese es mi amigo boludo.

–¿Pero si vamos a ir? ¿o no?

–Dale.

Estos dos estuvieron explotando algunas casas, en varias ocasiones los atraparon, pero no les importaba, pues bueno, era diversión, era tanta esa diversión qué se les pasó el día muy rápido.

Cuando se dieron cuenta ya era de noche y estaban muy lejos de sus casas.

Por lo qué "Spreen" llevaría a su "amigo" roier a una cueva que había descubierto hace nada.

–¿A donde mierda vamos?

–Ah qué te importa.

–O me dices o me dices.

–Lo sabrás cuando lleguemos.

–Te odio.

Pocas palabras se intercambiarán, pues en sí no había nada de qué hablar.

Ya habían caminado por mucho rato, y bueno, a Roier ya le había desesperado eso, cada vez se cansaba más, y parecía que al argentino no le importaba.

–¿Cuanto faltaaa? – Pregunto Roier alargando la "a" como era de costumbre, parecía que hasta en ningún  momento  no podía dejar de hacer bromas o estupideces.

–Ya poco.

–Ya le cansé.

–¿Y?

–Como que "¿y?" Cabron, dime cuanto falta.

–Qué poco.

–¿Pero cuanto es poco?

–¿Puedes callarte?

–Cállame.

–Dale.

–Era broma.

–...

Después de esa "broma" spreen ya no diría ni una sola palabra, pues bien no le pareció esa broma, además de qué si quería hacerlo.

Unos 12 minutos después se quedaría parado en un sitio, cosa que a Roier le parecía ¿rara?

–Muévete cabron.

–Ya llegamos.

–A su madre, porfin.