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Habían pasado alrededor de casi cuatro horas desde el incidente. La fiesta había comenzado hacía casi una hora y treinta minutos, pero no había rastro de Bahiyyih.
Casi siempre que la más pequeña salía, solía enviarle mensajes de vez en cuando a Hueningkai para darle a entender que estaba bien o simplemente para decirle que llegaría a un horario mucho más tardío. Pero nada de eso había ocurrido desde que lo ignoró por completo en la tarde, y eso lo tenía con los nervios de punta.
-Si sigues mordiendo tu uña así, vas a lastimarte -Taehyun prácticamente lo regañó, dándole un golpe suave en la mano.
Cuando Hueningkai le presentó a Taehyun a su familia, estos lo acogieron con mucha facilidad; incluso Taehyun estuvo casi una hora hablando con su abuela y escuchando un par de anécdotas. Y aunque su madre ya conocía al de cabellos rosados después de un par de visitas a la residencia, Huening le dejó bastante claro que era un gusto tenerlo allí.
A pesar de eso, la situación estaba bastante tensa, especialmente entre sus padres. Sabía que ambos se evitarían toda la noche, pero si su padre la cagaba y su madre se enfadaba... muy probablemente habría que llamar a una ambulancia. Así que Yeonjun y Soobin se encargarían de mantenerlos alejados, o por lo menos no solos en un mismo sitio.
-Ya pasó mucho tiempo y todavía no regresa. Le envié muchos mensajes, pero no estoy seguro si su teléfono está apagado o si bloqueó mi contacto -Se sentía fatal. Creyó que las cosas volverían a la normalidad luego de esa discusión, pero claramente no fue así.
-Acepta que es tu culpa, y cuando vuelva intenta hablar con ella. Y sobre todo, pídele disculpas a la niña bajita esa que parece una garrapata pegada a tu hermana.
-No creo que regrese, o espero que lo haga antes de decirles a mi familia que...
-Deja de pensar en eso un minuto. Yo creo que tu familia ya lo sospechaba. Tu padre me ha lanzado una variedad de chistes al respecto.
Hueningkai se sonrojó, cubriendo su cara con la mano por un par de segundos. Claramente, lo último que necesitaba era que su padre hiciera ese tipo de bromas.
Iba a responder algo cuando la puerta principal se abrió, dejando ver a una linda chica de cabello rosa adentrándose con un par de bolsas de supermercado, ropa y un peluche. Después, el cuerpo de Hikaru ingresó también a la casa con una mochila un poco más grande, una sábana pequeña y lo que parecía ser una bolsa con refrescos.
-Buenas noches -Ambas saludaron al unísono cortésmente a Taehyun, quien respondió con un asentimiento de cabeza y una leve sonrisa que hizo que Bahiyyih se sorprendiera un poco, aunque no quiso comentar nada.
-¿Por qué no contestabas el teléfono? ¿Qué es todo eso? -Hueningkai señaló las bolsas, consiguiendo un suspiro por parte de la menor.
-Me quedé sin batería -Soltó calmada-Son cosas que compramos para nuestra pijamada, así no interrumpimos tu fiesta.
