Capítulo 1

11 0 0
                                    


Sin rumbo caminaba, bajo el oscuro manto de la noche, la luna a medias era lo único que alumbraba mi andar, esperaba ya morir, no había nada para mí, mi familia fue asesinada ante mis propios ojos y no pude hacer nada más que esconderme, sólo quedamos mi hermano y yo, pero no sé nada de él desde hace unas horas. Pues distrayendo a quien quería hacernos daño él escapó por órdenes mías, yo logré escapar a duras penas.

Me senté en los pies de un árbol, descansando mis piernas pues ya no podía caminar debido al cansancio. Miré hacia arriba, viendo las hojas danzar al son del viento que suavemente soplaba.

— Duele... —Quejé refiriéndome a las heridas que estaban por todo mi cuerpo.

Oí pasos no muy lejos de mí, sólo cerré los ojos, esperando cualquier cosa, al parecer quien fuera que estuviera caminando por ahí no me vio, o eso creo, pues se fue sin más.

Al volver a abrir mis ojos, divisé la luna por entre las hojas de los árboles, sonreí como pude al empezar a cantar por lo bajo una canción que mi madre solía cantarme.

— Que esto ya termine... Por favor... —Escondí mi cara entre mis heridas rodillas.

Las lágrimas no tardaron en aparecer, me quedé ahí sin querer moverme. No sé en qué momento apareció, pues no sentí ni movimiento ni oí ruido alguno, pero una voz llamó mi atención.

— ¿Qué te sucedió?

Al levantar mi mirada, vi la silueta de un chico mirándome, sólo pude distinguir una coleta baja, pues estaba un poco a contra luz, y mi vista se encontraba algo borrosa.

— Eso quisiera saber... —Desvié mi mirada- Alguien apareció de la nada y asesinó a mi familia, mi hermano y yo fuimos los únicos sobrevivientes y no sé dónde está por habernos separado —Conté como si nada, abrazándome.

— ¿Por eso estás herida?

— ¿No es obvio? —Intenté levantarme al apoyarme del árbol, pero fue en vano pues me caí al perder el equilibrio.

Maldición, mis piernas están cansadas y adormecidas.

— ¿No tienes otro lugar a donde ir?

— No, la única familia que tenía ya no está, no tengo tíos o tías, y mis abuelos murieron hace mucho, estoy sola -Tomé asiento nuevamente.

Un silencio hizo presencia, de un momento a otro, aquél chico me levantó y me cargó como costal de papas.

— Oye qué —Logré decir debido a la sorpresa— ¿Me estás secuestrando?

— No, solamente te ayudaré, se ve que no puedes caminar, y si te dejo así, tus heridas se infectarán.

— No es necesaria tanta molestia.

— Cállate y agradece mi ayuda, ¿sí? es lo menos que puedes hacer.

— Disculpa...

Anduvo caminando por un rato, debido a que era tarde, se detuvo en una cueva del lugar, al adentrarse un poco me dejó con cuidado en una roca.

— Quédate aquí, no tardo —Dijo y se fue sin más.

No tengo otra opción, no puedo caminar.

Pasados unos minutos, volvió con algunas ramas, hizo una especie de fogata y se sentó tomando distancia de mí.

— Déjame ver tus heridas —Ordenó extendiendo hacia mí una de sus manos.

Como buena niña, le extendí mi brazo más herido, él lo atendió con sumo cuidado, y me colocó vendas en las heridas "más graves", hizo lo mismo con todas mis heridas.

°|~Fue el destino~|° - Giyuu x T/NDonde viven las historias. Descúbrelo ahora