Capítulo 2

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Un mundo extraordinario, donde las nubes son de algodón de azúcar, hay ríos y mares de chocolate, tu ídolo favorito es el gerente de la tienda de la esquina. El mundo de los sueños es infinito y como tú lo quieras imaginar, ahí me encontraba yo, en el maravilloso, e increíble mundo de los sueños profundos, cuando me tuve que despertar, pues ya era hora.

Abría lentamente y poco a poco mis ojos, la luz del sol me llegaba directamente y me encegaba, al poder abrir los ojos y haberme acostumbrado un poco a la luz veo que el mundo se mueve de izquierda a derecha, ¿Estaba caminando? No, no lo creo, no sentía movimiento.

Mirando levemente hacia un lado, veo la mandíbula de nada más, y nada menos, que de Giyuu... ¡NO PUEDE SER! no puede ser, no puede ser, me encontraba en brazos del chico más apuesto que he visto nunca, me estaba cargando como princesa ¿Cómo llegamos a esto? ¿Qué pasó mientras dormía?

Ay Dios, sentía que me iba a desmallar.

— Veo que ya despertaste... —Dijo aún con la mirada en el camino.

— B-buenos días... —¿Eran días o tardes?— ¿P-puedo preguntar a dónde me llevas?

— Traté tus heridas lo mejor que pude, pero aún son algo graves y no te pienso dejar así. Te llevaré a la finca de una compañera, ella tratará con mejor tus heridas —Que lindo, se preocupa por mí...

— No es necesario... —Cierra la boca T/N por favor— Yo... no quiero estorbarte...

— No tienes a donde ir, además, es parte de mi trabajo ayudar a las personas.

Me quedé callada, una sonrisa bobamente dulce se formó en mis labios, sin pensarlo me acurruqué en su pecho.

— Gracias por preocuparte... —

Susurré cerrando por un momento mis ojos, se sentía cálido y reconfortante... quería que este momento durara todo el tiempo posible...

— ¿Puedes caminar? —Cuestiona éste luego de ya un rato.

— Escapando me tropecé y me torcí el tobillo, siendo sincera no sé cómo logré caminar desde aquél lugar hasta el árbol donde me encontraste... —Expliqué, con una pequeña risa nerviosa.

— Hm, ya veo... —Dijo para que luego se formase un silencio.

Este tipo de momentos donde hay un silencio es común desde que estoy con él, y sinceramente no me molesta, me es cómodo de alguna manera y me agrada.

( . . . )

No sé si fue porque estaba cómoda en el viaje, o porque estaba más concentrada en quien me cargaba durante el trayecto, pero no tardamos mucho en llegar a nuestro destino.

— Que lindo lugar... —Dije al ver la estructura.

Al acercarnos más, vimos a una chica, de cabello negro con las puntas delanteras de su cabello de color morado, un broche de mariposa sosteniendo su cabello en la parte de atrás, ojos de un color morado bello con una sonrisa dulce.

Vaya mujer tan hermosa presenciaron mis ojos.

— ¿Oh? Cielos Tomioka-San ¿Quién es tu amiga? —Cuestiona de manera amigable la chica al mirarnos.

— S-soy T/A T/N... —Me presenté un tanto nerviosa.

— Que bello nombre, ¿Cómo terminaste tan herida, cariño? —Basta, estoy dudando de mi sexualidad.

Estaba a punto de hablar, cuando Giyuu se me adelanta y habla él primero.

— ¿Puedes atenderla?

— Claro, sólo déjala en una de las camas y enseguida voy —Habló la chica al dirigirse hacia adentro de la construcción.

°|~Fue el destino~|° - Giyuu x T/NDonde viven las historias. Descúbrelo ahora