Papá Por Accidente YM (Terminada)

CAPÍTULO XXVII

El rubio manejaba tranquilamente con una sonrisa entre sus labios al recordar lo que el pálido alfa había hecho para que le dejara cuidar a Yoon, esos pequeños detalles eran los que le demostraban que el rapero estaba cambiando, pero su sonrisa se desvaneció al recordar a esa horrible Omega.

– ¿Realmente será su nueva Omega? – se preguntó

– No – contestó Mochi de manera brusca – esa fea omega no puede ser pareja de MI ALFA.

– No es tu alfa, así que deja de estar de celoso – le reprendió

– ¿Yo estoy celoso? Quién dijo: Veo que no pierdes el tiempo Min – se burló Mochi.

– Últimamente te estás volviendo muy insolente – le dijo a su lobo.

Ya estaba llegando a la casa de su padre, cuando el portón se abrió estaba muy nervioso desde su adolescencia no hablaba con su papá, y a decir verdad siempre sintió lástima de como vivía junto a su madre, la alfa perfecta según ella. Nunca entendió porque su madre vivía reclamándole a su papá ni porque los trataba mal.

– Buenas tardes Joven Park – saludó la ama de llaves – lo esperan en la sala.

Agradeció antes de continuar, conocía tan bien esa casa, conocía tan bien esa casa, buenos y malos momentos que vivió ahí, trató de evitar recordar esos malos recuerdos. Caminó hasta la sala donde lo esperaban.

– Mimi – se oyó la gruesa voz de su hermano, quién se puso de pie.

Se acercó y lo recibió en un fuerte abrazo, esa acción a Jimin le sus días cuando era aprendiz de baile contemporáneo, todos los días después de clases era recibido por el pequeño Jung Min de 5 años con un abrazo después de gritar su nombre.

– Minnie – dijo correspondiendo el abrazo.

– Cariño – también se acercó

– Papá – lo abrazó – ¿Cómo estás?

– Les contaré todo – dijo tomando una mano de sus dos hijos.

Los tres omegas se sentaron en la sala para poder hablar cómodamente, su padre primero les contó y les puso al corriente de lo que estaba ocurriendo con su divorcio y la empresa.

– Nunca entendí porque no nos quería – dijo Jung Min

– Y...yo debo contarles algo muy importante – dijo nervioso

– Puedes decirnos cualquier cosa – habló Jimin – estamos contigo.

– Bueno, todo empezó cuando tenía 15 años acababa de presentarme como un Omega, fui la decepción de mis padres por eso al enterarse me comprometieron con una alfa hija de uno de los socios de mi padre el señor Park, pero ella me rechazó, me cambiaron de escuela para que no se corriera la voz que fui rechazado, en la nueva escuela conocí al alfa de mis sueños, fue amor a primera vista y ahí me di cuenta que Park Hyung Sik era mi destinado, él tenía 18 años así que estaba en último grado de preparatoria.

– Entonces mamá no era tu destinada – dijo Jimin

– No lo era – dijo el padre con tristeza

– Pero ¿nunca le dijiste a mis abuelos que él era tu destinado? – preguntó su hijo menor.

– Claro que no les dije – suspiro – Hyung Sik era el resultado de la relación extramarital del señor Park, así que aunque llevará el apellido Park para la sociedad seguía siendo un bastardo pero a mí no me importó eso y apresar de que sabía que nunca aceptarían nuestra relación nos veíamos a escondidas porque ambos nos amabamos – dijo con tristeza.