I. Primer encuentro

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- ¡Atrápala!

- ¡Eh!, ¡No tan alto!

A pesar de que corrió lo más rápido que pudo, Seungcheol no alcanzó el balón que había arrojado Soonyoung con todas sus fuerzas para evitar que marcaran a su compañero de equipo. Este salió disparado por la puerta del gimnasio donde se hallaba la cancha de baloncesto, acabando por golpear la rodilla del joven Jeonghan, quien lanzó un alarido de dolor que podía jurar que se escuchó en el campus entero. El joven cayó al suelo y Jihoon en seguida se apresuró para socorrerlo. Fue cuando llegó Seungcheol a disculparse a base de pequeños "lo siento" y reverencias ligeras y repetitivas, arrodillándose ante él.

- ¡¿Estás bien?!, ¡¿Quieres que te lleve a enfermería?!

- ¿Tú quién eres? -Preguntó Jihoon con la mirada más atemorizante que pudo mostrar en ese instante. Seungcheol jamás pensó que sentiría miedo de aquel chico que anteriormente había seguido con la mirada durante los recesos.

-Uhm, yo... Seung-

- ¿Es tuyo el balón?

-Es... es del taller de baloncesto... -La voz de Seungcheol apenas era audible, evitaba a toda costa encontrarse con los ojos de Jihoon, los cuales parecían desollarlo vivo.

- ¿Estás en él?

-Sí, uh...

- ¿Y no sabes jugar acaso?, ¿Cómo es que se te escapa el balón del gimnasio? Ten cuidado, y ni se te ocurra ponerle un dedo encima a Hannie.

-Jihoon-ah, ya... Tranquilo, no me pasó nada... -Jeonghan trató de calmar un poco a su amigo, pero él estaba sulfurado, su rostro blanquecino se había tornado rojizo debido a la rabia pura. Intentó levantarse, pero su pierna flaqueó y acabó de vuelta con ambas rodillas en el suelo, quejándose nuevamente.

- ¿No puedes caminar? -Preguntó Seungcheol, posando una mano en el hombro del chico herido.

-Cállate -. Ordenó Jihoon, apartando la mano que deseaba ayudar a Jeonghan-. Te llevaré a enfermería, sostente de mi hombro, Hannie.

- ... Lo siento, pero déjame ayudar. Podría cargarlo en mi espald-... -Seungcheol se acomodó en el suelo, pero Jihoon rápidamente levantó a Jeonghan y lo cargó él mismo en su propia espalda.

- ¿Me ves con cara de necesitar ayuda para llevarlo? Toma tu balón y vete.

Jeonghan miró a Seungcheol con un rostro apenado e inclinó su cabeza de manera sutil en señal de agradecimiento antes de marcharse, y el pobre golden retriever vio cómo se alejaban ambos en completo silencio, sintiendo su orgullo completamente destrozado y pisoteado. Jihoon no pronunció ni una sóla palabra más hasta llegar a la enfermería, suspirando pesadamente una vez se aseguró de que el chico estuviese descansando en la camilla de la sala.

-Maldita sea... Hannie, ¿Sí viste quién era?...

-¿Ese era tu crush?

El más bajo asintió y escuchó cómo su queridísimo mejor amigo se deshacía en risas.

- ¡No puede ser! Tú y tu suerte, Jihoon-ah.

Chasing Your Own Tail [JICHEOL] (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora