La Boda

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La boda...

"No puedo hacer esto. ¡No puedo hacer esto!" Blaise susurró frenéticamente mientras era arrastrado al altar, un padrino a cada lado. Maldijo por dentro. Si se hubiera esforzado lo suficiente, probablemente podría haber convencido a Harry para que lo dejara salir "a caminar", pero Draco era demasiado inteligente para caer en eso. Sin embargo, aquí estaban ocho minutos para el gran día y tenía toda la intención de darle una última oportunidad.

"¡No es natural!", Protestó desventurado, arrastrando los pies. "Voy a arruinarlo. Diré que mis votos están mal o dejaré caer los anillos o algo así. ¿Qué estaba pensando? ¡No estoy hecho para el matrimonio! ¡Soy un playboy! Se supone que debo estar en bares, tomando malas decisiones en la vida. ¡Ayudar a las mujeres jóvenes a tomar malas decisiones en la vida! ¡Es lo que hago!"

"Y esto", dibujó Draco, apretando el brazo de Blaise, "es la razón por la que tienes dos padrinos".

Harry se rió y empujó a Blaise por si acaso. "Es demasiado tarde", aceptó alegremente. "Esto es todo, compañero. Fin de la línea".

"No", Blaise se quejó inquieto. El altar donde toda su vida cambiaría estaba un poco más abajo. Sus amigos y familiares miraban con caras esperanzadas y susurros emocionados, el Ministro sonreía con benevolencia y luego... él diría las palabras y se casaría con Ginny por el resto de su vida. Casado con la chica más bella y maravillosa del mundo...

Por el resto de su vida.

"No", susurró Blaise, prácticamente paralizado por el miedo. "No no no no ..."

Harry y Draco intercambiaron miradas exasperadas mientras lo veían descender casi histérico. Afortunadamente, Ron eligió ese momento para deambular. "¿Y cómo estamos haciendo este buen día?", Preguntó alegremente.

Draco puso los ojos en blanco e hizo un gesto a Blaise, que ahora sostenía su cabeza entre sus manos. "Prueba A", dibujó.

Ron se rió y negó con la cabeza. "Todo lo que tenías que hacer era mantener tus patas alejadas de mi hermana", le informó a Blaise. "Pero si te hace sentir mejor, Ginny ha tenido algunos ataques de pánico propios".

La cabeza de Blaise se rompió. "¿Ella lo ha hecho?"

"Traté de salir por la ventana, si no me equivoco. Mione la detuvo a tiempo".

"¡La ventana!" Blaise gimió miserablemente. "¿Por qué no pensé en eso?"

Ron lo ignoró y condujo a Harry hacia adelante. "Estás despierto, Harry", dijo. "Póngalo en forma, ¿quiere? Mamá va a tener un ataque si hay dos corredores en la boda".

Blaise logró otro gemido de miseria abyecta antes de que Harry interviniera. "Nadie va a correr", dijo. "No en mi reloj".

Puso sus manos sobre los hombros de Blaise y lo miró a los ojos. "Ahora mira", dijo con firmeza. "Eres una de las personas más imprudentes, confusas y exasperantes que he conocido. Ya sabes, salvo algunos". Tuvo que luchar contra una sonrisa cuando captó el giro de ojos de Draco. En cambio, se centró en calmar al novio aterrorizado que parecía apto para salir corriendo en cualquier momento. "Estás loco, eres imposible, eres responsable de más de la mitad de los líos en los que me meto regularmente y, a veces, simplemente no entiendo cómo terminaste siendo uno de mis mejores amigos. Pero aquí estamos. Seis años y todavía estamos aquí. Y sé que puedes hacer esto porque eres Blaise Zabini. Tienes un plan para todo, una jugada para cada situación y cuando no lo haces, lo inventas a medida que avanzas. Eso es lo que vas a hacer hoy. Prometo que cuando esté hecho, saldrás bien. Como siempre lo haces".

Cómo conocí a tu padreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora