03︱ A date?

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⁂ 𝑪𝒉𝒂𝒑𝒕𝒆𝒓 𝒕𝒉𝒓𝒆𝒆 ⁂
¿𝑈𝑛𝑎 𝑐𝑖𝑡𝑎?




















DANIELA SE DESPERTÓ UN POCO TEMPRANO se había despertado y por más que intentó volver a dormir no pudo, en cambio Camila seguía dormida, la joven se encaminó al baño, tomó una ducha, se arreglo, al salir se dio cuenta que su amiga seguía gozando de un profundo sueño así que se dispuso a despertarla

—Camila despierta son las nueve de la mañana - dijo mientras jalaba las cobijas.

— Cinco minutos más mamá

— Cinco minutos nada, ya parate floja.

— Daniela es domingo, dejame dormir. -dijo mientras se tapa hasta la cabeza con la cobija.

— O te paras o te echo agua

—Ya voy señorita madrugadora

La pelirroja se encaminó hacia el baño, pero antes de entrar choco con la puerta, y callo al suelo.

— Por Dios Camila fijate - dijo la castaña mientras ayuda a su amiga a pararse.

— Ay wey mi mente - por el fuerte golpe la pelirroja se agarraba la cabeza.

— Corre a bañarte, te deje algo de ropa, voy a la cocina, y porfavor Camila no te tardes mucho - dijo la castaña saliendo del cuarto.

Bajo hacia la planta baja rumbo a la cocina, ahí se encontraba su Nana, preparando el desayuno, Dani se dirigió hacia ella y la espanto.

— Buuu!

—Ay Jesus de Veracruz haras que me de un infarto Dai.

Dai era el apodo que Mari le había puesto cuando ella solo tenía 4 años, desde entonces solo ella se lo puede decir.

—Haci a de tener su conciencia Nana Mari -dijo mientras agarraba un pedazo de melón.

— En vez de estarme espantando y estar comiendote la fruta ayudame a hacer el juego de naranja, andale.

La joven fue por el exprimidor y por una jarra, empezó a hacer el jugo mientras platicaba con su Nana.

— Mañana a que hora entras a la escuela Dai? Para decirle a Julián que te lleve.

Julian era el esposo de Mari, ellos siempre cuidaron de ella y de sus hermanos, los jóvenes veían al matrimonio como unos abuelos.

— No te preocupes Mari, puedo irme en Metro-bus o en el metro por mi no hay problema.

— No mijita como crees, es muy peligroso y luego que todavía está oscuro, mejor que Julián te lleve no creo que tenga problema.

— Mari sabes que a mí no me importa irme en el Metro o Metro-bus, se moverme en ellos, aparte no quiero despertar al Lolo, debe de estar cansado.

— Hay mijita esta bien, pero recuerda mandarle tu ubicación a los muchachos.

— Si nana no te preocupes

ALL FOR US │Kevin ÁlvarezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora