Vínculos Desgarrados

2. Un nombre

-Ro.....Rooo.....¡ROWAN!- Sentí el grito en mi oído izquierdo, haciéndome saltar por el susto

-¿QUE? ¿¡QUE PASO!?- Grité, asustada, me giré rápidamente, Ela estaba llamándome, pero no me di cuenta

-¿Que haces?- Me miraba con curiosidad, mientras sostenía a la bebé, sí, tuvimos una laaaarga charla y al final acepte que no podía tenerla yo todo el tiempo, aún no sabíamos de dónde venía, bueno, no sabíamos nada de ella

-Yo....- me di cuenta de lo que hacía, estaba mirando mis ojos en el espejo del baño- no lo sé, sentí que necesitaba detallarlos, en verdad ella- señalé a la bebé- tiene los ojos del mismo color... pero ...hay algo, un toque distinto, ¿no te parece?- salí del baño, acercándome a las dos, tratando de descifrar este presentimiento, no lo entendía, era claro que sí había algo diferente, pero no lograba averiguar que era

-mmmmmm- Ela, quien obviamente sentía muchísima curiosidad por ella, la miró fijamente, y la bebé, que ahora si estaba despierta, también la miró, se miraron, 5... 10... 15 minutos, mucho silencio y por un instante, sentí que se comunicaban telepáticamente

-Sep- dijo, apartando la mirada- Nada, no entiendo- Estiró los brazos, ofreciendome que cargara a la bebé, sentí la corriente en cuanto la tomé, y.... las visiones

-¡Maldita sea! Ro!- Alcancé a escuchar antes de desmayarme, y sentí sus brazos aferrándose a mi

-¡Es tu deber!

Eso fue lo único que dije en la grabación

-¿Solo eso?- pregunté, estaba el doble de confundida, era normal que describiera los lugares donde me encontraba en las visiones, pero, esta vez, no había nada más que eso, me sentí frustrada, intenté recordar la visión, pero nuevamente me fue imposible, no saber cuál era mi realidad y que era lo que pertenecía a las visiones me alteraba, no era algo que me pertenecía, y eso, me molestaba, además del dolor físico que me dejaban las visiones, intentar recordarlas era el doble de doloroso, había algo que me lo impedía

-Solo eso- aseguró Ela, nuevamente sosteniendo a la bebé, al parecer no la solté en mi desmayo, pero la retiró de mis brazos, por seguridad

-Dos visiones en un día, nuevo récord- dije, suspirando, las visiones no sucedían todos los días, y mucho menos en intervalos de apenas unas horas, observé a Ela, estaba sentada en el sofá de la salita, con las piernas cruzadas y la bebé en medio, Ela miraba hacia el frente, tratando de encontrarle sentido a esta situación

-Dámela- le pedí, acerqué mis brazos a ella, con intención de retirarla de su regazo, sentía la necesidad de tenerla conmigo

-Na ah- Me detuvo con la mano en mi estomago- alto ahí, señorita, te desmayaste no bien la tuviste en brazos, es claro que, de alguna manera, ella activa tus visiones- me miró seria, demasiado para ser Elara

No supe como reaccionar, no esperaba que se negara a mi petición, solo me quedé allí, de pie, mirándola

-Ela- Quería sonar sería, pero salió más como una súplica- No pasará nada, te lo prometo

En realidad no sabía que iba a pasar, ella tenía razón, no podía arriesgar a mi cuerpo a tanto esfuerzo, de todas formas, no había pasado mucho tiempo de aquel accidente

-Rowan Kaelen Ravenswood- Su voz salió molesta, en un tono bajo, retándome

-No me llames por mi nombre completo- A pesar de que queríamos desligarnos de nuestro pasado, aún habiendo escapado, estábamos obligadas a vivir bajo el mismo nombre que nos dieron al inicio de todo, era, automático, muchas veces intentamos llamarnos por nombres diferentes, pero el resultado siempre era el mismo- Sabes muy bien porque lo evitamos- dije también molesta