¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Hace un tiempo que trabajo en este lugar, y sinceramente esto estaba acabando con mi cordura, quiero decir, tenia un trabajo estable con un sueldo envidiable y con la área más peleada, era aun muy joven y ya tenía "todo" lo que un chico de mi edad puede pedir.
Pero... todo esto era aburrido, estoy en el área de aislamiento en la cárcel con mejor conducta de corea, lo que significa que nadie iba al área de aislamiento, me la pasaba todo el día sola rodeada de todas esas celdas de acero que lo único que tenían dentro eran solo concreto, al llegar a mi casa era casi lo mismo, me había independizado una vez que conseguí este trabajo, en ese momento creí que era una buena idea, pero al estar completamente sola en mi trabajo y llegar y estar de nuevo completamente sola en mi casa, eso ya era triste
Con el tiempo comencé a implorar que alguna reclusa se peleara o tuviera una pésima conducta para que al menos tener alguien con quien convivir por unos días, ni siquiera tengo amigos y mi padre, ese era un tema completamente diferente, él es un político influyente dentro de las leyes, es por eso mi buen puesto, se la pasaba trabajando todo el día y tenia dinero de a montones, simplemente ir a donde mi padre no era una opción, sobre todo cuando él fue el primero en oponerse a que yo fuera policía, aun así, fuera de eso, él me ama mucho, siempre demostrándomelo, no iba con él por la única razón de que siempre que iba sacaba el tema de que fuera su sucesora y me metiera de lleno a la política, era algo agobiante estar bien con él y de un momento a otro encontrarnos peleando porque no quiero ser como él
En conclusión: Poco a poco voy perdiendo la cordura
Me encontraba ahora mismo bailando mientras tarareaba una canción, movía mis caderas y cuerpo al compas de "la música", les daba un espectáculo a mis fans imaginarios, bailaba en el pasillo de las celdas, esto siempre lo hacía cuando comenzaba a sobre pensar de más por el silencio que habitaban entre esas paredes, el hacer eso de alguna manera me entretenía y me hacía concentrar en otra cosa que no fuera en volverme loca
Pasaba mis manos y brazos alrededor de mis curvas, pecho y glúteos, haciendo un baile que vi hace poco en un video musical, mientras movía mi cabeza y sonreía a alguien inexistente, estaba sacando todo de mí en el concierto imaginario que estaba dando, el gran final se acercaba poco a poco y justo cuando ya estaba por hacerlo...
Un gran estruendo se escucho afuera de la sala, golpeaban esta como si su vida dependiera de ello, salte en mi lugar por el susto que me causo el gran sonido preveniente de afuera, corrí con velocidad para abrirla, de inmediato, mis ojos observaron a dos policías sostener a una chica que apenas y podía sostenerse de píe ella sola
-Felicidades Han, es tú primera reclusa - hablo una de las policías con una sonrisa burlona mientras me veía atenta - ¿y bien? - pregunto después de un momento
