𝑨𝒅𝒗𝒆𝒓𝒕𝒆𝒏𝒄𝒊𝒂: 𝑰𝒏𝒔𝒊𝒏𝒖𝒂𝒄𝒊𝒐𝒏𝒆𝒔 𝒂 𝒍𝒂 𝑺𝒐𝒍𝒆𝒅𝒂𝒅
𝑷𝒆𝒅𝒊𝒅𝒐: 𝑨𝒏𝒐́𝒏𝒊𝒎𝒐
𝑺𝒆𝒓𝒊𝒆: 𝑯𝒆𝒂𝒓𝒔𝒕𝒐𝒑𝒑𝒆𝒓
Considero que la vida es como un libro, uno abierto, pero a la vez cerrado a las demás personas; Cada persona tiene un libro diferente, muchos de ellos sus capítulos están repletos de aventuras, amoríos o felicidad, pero en mi libro no, bueno, en mi libro lo único que se encontraba eran millones de paginas en blanco esperando ser rellenadas o al menos garabateadas por alguien o algo.
𝐈𝐍𝐈𝐂𝐈𝐎
Mi mente divagaba al igual que mis ojos a través de mi cuarto, observaba cada mínima cosa por más pequeña que fuera y me sumergía en ese constante hoyo sin fondo llamado "soledad", de igual forma, no me quedaba de otra más que esto, no tenía una cosa mejor que hacer que quedarme en mi habitacion a esperar que el día se termine y así por fin dormir y volver a repetir la rutina al día siguiente.
Sin embargo, aunque pretendía aquello, el repentino antojo de jugo de naranja hizo que por primera vez en el día me levantara de mi cama y de la brillante pantalla de mi computadora portátil, en el momento en que mis pies tocaron el suelo, fue como si la cama tuviera enormes brazos y quisiera que regresara a ella, por más que lo deseara, y muy a mi pesar, hice caso omiso y me levante de esta por completo
Tori bajaba las escaleras hacía la planta baja con normalidad, sin importarle realmente su exterior, a paso moderado y con tranquilidad, camino hasta su cocina, en donde con cuidado saco un bazo de uno de los cajones y después sacaba un embace de jugo del refrigerador, con cuidado vertió el liquido anaranjado a su vaso para después colocar este en el refrigerador, con cuidado busco en otro cajón un "popote" y se lo coloco a su bebida dispuesta a tomar un trago de esta.
Antes de que se pudiera dar cuenta, sonidos de voces comenzaron a escucharse en la entrada de su casa, escuchando risas y bromas.
Tori, quien antes no le habría tomado importancia por el hecho de que podría ser el novio de su hermano (y su hermano) los dueños de aquellas voces, ahora sí que le dio importancia, escuchaba otra voz ajena a la de ellos dos, no era una gruesa o masculina, era más bien una delicada y claramente femenina
"La curiosidad mato al gato", decían, pero yo siempre fui ajena a todas esas advertencias, jamás hice caso a ninguna de ellas, si bien no me considero una persona curiosa o alguien a quien se mete en donde no la llaman, esta vez si que quería ser o saber de quién era esa voz.
Camine con mi vaso en manos hasta donde provenían aquellas voces, encontrándome a tres cuerpos de espaldas, uno bajito y de pelo corto negro (ese era mi hermano claramente), otro de espalda ancha y alto, con el pelo coto de color rubio miel (Esta más que claro que ese era Nick), sin embargo, ahora podía notar a la otra persona, este era (o más bien esta) era alta a comparación de Charlie, pero baja al lado de Nick, se podía notar la figura fina de su cuerpo, empezando con su espalda pequeña y delicada junto con sus curvas remarcadas, su pelo era largo (llegando a la altura de su cintura) del mismo color que el de Nick, de un rubio miel (solo que el de ella tenía reflejos rojizos)