3. El trío del que el señor White no se puede enterar

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Jesse se tumba en la cama y deja que, para empezar, los hombres se deleiten con sus finas curvas y los atractivos moretones que cruzan su cuerpo. Está aún medio drogado, pero no por eso su rostro aniñado y sus finos rasgos resultan menos atrayentes. Se despereza como una gatito en la cama y Gus se acerca a él acariciando sus muslos con fina pelusilla rubia que Mike se queda mirando como hipnotizado. Esos suaves pelos cubren la mayor parte del precioso cuerpo de Jesse y Mike no puede dejar de mirarlo con los ojos oscurecidos por el deseo. Se acerca también, tanteando la reacción del jefe y éste le mira severo para que obedezca sus órdenes como si estuvieran en una operación más.

Le indica que levante a Jesse de la cama y le haga subir una pierna a la mesilla de noche contigua y saca un artilugio que no ha probado pero con el que piensa deleitarse, y cree que Jesse y él harán buenas migas. Se lo pasa a Mike y le pide que lo introduzca por su ano con un simple "mételo". Mike observa la sumisión de Jesse, esperando instrucciones y abierto de piernas para que los hombres hagan lo que quieran con su cuerpo y deduce que aquello no está bien, pero no puede contradecir al jefe, así que toma el aparato con forma de pene y escupiendo en él para no hacer más daño al joven, lo mete lentamente en el cuerpo de Jesse, que se tensa pero afloja el esfínter para que entre lo que sea que ellos quieran meterle. El artilugio empieza a moverse solo, manejado por un mando a distancia que acciona Fring y éste se sienta cómodo en una butaca a ver el espectáculo. Le pide a Mike que de vez en cuando, si ve que Jesse se adormece, le de varias nalgadas para dejarlo espabilado y el hombre obedece, sintiéndose excitado por el culo del jovencito que sigue el son al que lo está penetrando Fring con el juguete.

El pene mecánico comienza a correrse en el interior de Jesse y el chico se sorprende, intentando sacarlo, pero Fring pretende seguir jugando y le silba para que se quede quieto. Jesse no empuja afuera el aparato, sino que lo sigue manteniendo dentro mientras no para de follarlo y soltar alguna clase de símil de esperma. La velocidad no parece ser suficiente para Fring, por lo que pide a Mike que lo mueva más rápido y muchos fluidos se escapan por el rosado y maltratado ano. Jesse gime muy cachondo por tener tan cerca al hombre que tanto ha cuidado de él y lo ayudó a casi salir de las drogas, le debe mucho y quiere compensarlo, por lo que toma su polla y la soba por fuera del pantalón también sujetandose de su brazo para ganar estabilidad. Fring sonríe diciendo que esa puta nunca tiene suficiente y Jesse suspira más excitado por los insultos del jefe. Mike sujeta fuerte el brazo de Jesse y le indica que si quiere parar sólo tiene que apretarlo así. Jesse no parece entender, pero minutos más tarde la fuerza que usa para agarrarse de Mike, asusta al hombre y acerca su oído al muchacho para escuchar si quiere que pare, Jesse susurra que se está meando y que no puede aguantar si se corre...

Fring,  divertido, lo traslada a la enorme ducha de la suite y sigue follando él mismo el agujero de Jesse con su polla, mientras Mike sujeta el vibrador en la mano sintiéndose estúpido

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Fring,  divertido, lo traslada a la enorme ducha de la suite y sigue follando él mismo el agujero de Jesse con su polla, mientras Mike sujeta el vibrador en la mano sintiéndose estúpido. La polla negra de Gus entra y sale rápidamente repleta de esperma falso y los sonidos del choque contra las nalgas de Jesse son ensordecidos por los gemidos del jovencito. Éste empieza a correrse al tener la próstata más que machacada y Fring le da permiso para orinar si lo necesita. La polla tiesa del muchacho empieza a soltar tantos líquidos que no se sabe ya lo que es debido al placer o a la necesidad fisiológica, pero Jesse se siente tan aliviado al soltar esos chorros, que a punto está de caerse, lo que hace a Mike entrar en la ducha para agarrarlo y no dejar que ambos caigan al suelo. Jesse tiene verdadera mala suerte, porque Fring da una última estocada antes de correrse que lleva al más joven a orinarse más sobre la chaqueta de Mike. Fring se marcha tras conseguir su objetivo y da indicaciones a Mike para que saque a Jesse de allí y lo lleve a la lavandería a trabajar con el señor White que seguro lo espera para empezar.

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