Lia

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Quién diría que entrar a trabajar sería entrar a un mundo de aventuras. Cuando llegue aquel lugar nunca pensé que viviría un caos en mi vida, y ¿por qué estoy diciendo eso?
Por qué tú no lo sabes pero yo la primera vez que te vi fue bajando de una camioneta, directo a tocar el timbre de aquella puerta negra, la segunda vez fue detrás mío preguntando - ¿Aún no te abren? - la respuesta era clara...

Yo sé que solo a ti Juls te había hablado de mi, pero yo ya sabía que Lia era la mejor de su equipo, que hacía excelente trabajo y que era tan buena que todos la querían, ¿quién me contó de ti?, eso está de más pero desde ese momento tú ya estabas dentro de mi. Sin embargo, cuando empecé a conocerte mejor, me llamaba la atención lo extrovertida que eras, y lo orgullosa que te notabas al decir que tú hacías dudar a todas de su sexualidad.
La primera vez que nos fuimos juntas en metrobús fue gracias al buen gusto musical que tienes, ese día "alguien más" fue la clave para este gran cruce. Escuchar tu buen gusto en canciones mientras me contabas cómo estabas obsesionada por una morra que te ponía mal en todos los sentidos. Eso era agradable, hasta que me enviaste aquel mensaje diciendo - me gustas- incluso ahora sigo pensando que era broma. Y es que yo no estaba acostumbrada a que me dijeran las cosas de forma tan directa, pero lo hiciste y viniste a causar el caos más grande del año.

Después de eso nada volvió a ser igual, las primeras flores que me regalaste me hicieron darme cuenta que estábamos causando un impacto en la otra, después de ese día decidiste cortar lo que habías construido con tal de estar con esa persona que creías era la indicada. No te juzgo, pero... me alegro de que te hayas dado cuenta que ella no es para ti. Sin embargo, quien diría que a partir de ese día todo sería diferente.

El gran cruce Donde viven las historias. Descúbrelo ahora