El accidente-Alejandro Balde

Disculpas aceptadas

ALEJANDRO

Hoy tengo que ir a hacer dos cosas, primero ir a por los papeles de la baja en la Masía y lo segundo ir a casa a de la niñata y su amable madre a hacer el parte del coche.

-Edi me llevas porfa vor-le pregunto a mi hermano cuando veo que no está haciendo nada

-Hermano, díselo a Samuel que no está haciendo nada-me dice mientras juega así juego en su móvil

-Hermano, se te ha olvidado que Samu está en Grecia de vacaciones-mi hermano se levanta rápidamente y camina para ir a buscar el coche en el garaje.

Le sigo y cuando estamos dentro del vehículo, salimos y ponemos rumbo a la Masía, llegamos y nos encontramos a Carlos, un niño al que le tengo mucho aprecio.

-¡Balde!-me dice el niño en cuanto nos ve a mi hermano y a mí.

-Hombre, él cascabeles-le dice mi hermano en cuanto se nos pone delante

-Edi, cuántas veces te he dicho que no me llames así-dice Carlos haciéndose el enfadado.

-muchas, pero desde que pasó lo de navidad ya no se me quita el apodo de la cabeza-le responde mi hermano.

-Déjalo en paz no ves que tiene seis años-el crío se abraza a mi cuerpo y yo como puedo correspondo

-bueno, peque, nosotros vamos a coger unos papeles y nos vamos-nos despedimos del niño, cogemos los papeles y nos vamos a nuestro, bueno, mejor dicho a mi destino.

-De mientras que tú haces el parte yo voy a comprar al Mercadona de aquí al lado, qué mamá me ha mandado a hacer la compra-asiento y seguimos el camino, cuando llegamos me bajo del coche y voy hacia donde me espera la señora Cecilia, en una portería.

-Hola Cecilia, qué tal estás?-pregunto amable mientras le doy un abrazo.

-Bien cariño, como vas tú con el brazo?-me pregunta ella mientras esperamos al ascensor.

-Bueno, allí vamos, voy a estar entre tres y cinco semanas de baja, y de rehabilitación-llega el ascensor y nos metemos en él, Cecilia pica a un botón y a los pocos segundos llegamos.

-Pasa, como si estuvieras en tu casa-me dice Cecilia mientras me regala una sonrisa

-Gracias Cecilia-le agradezco

-De nada, me haces un favor, puedes ir a la habitación de Andrea y decirle que venga-asiento y ella me dice la puerta, voy corriendo hacia el dormitorio y pico antes de entrar

-Pasa-entro y veo como Andrea está viendo la tele mientras come palomitas.

-¿Otra vez tú?-me pregunta cuando me ve

-Sí, pero venía a decirte que he venido a hacer el parte, ya que tu madre me dijo que cuando tú salieses que viniera a hacer el parte-le explicó resumidamente mientras ella me mira atentamente.

-Oye, quería pedirte perdón por cómo te trató, me imagino que ya te lo habrá dicho mi madre, pero es que soy muy antisocial-le dedico una sonrisa y me acerco a ella.

-Disculpas aceptadas, ahora vamos al comedor, que tu madre nos está esperando-me ayudo como puedo a levantarle, pero no he podido por qué me ha dado un pinchazo fuerte en el brazo

-Hostias-dice Andrea cuando suelto un jadeo de dolor, rápidamente aparece Cecilia en la habitación y nos ayuda a los dos, vamos hacia el comedor y cuando llegamos nos sentamos en las sillas.

-Hacerlo vosotros, Andrea ya sabe colmo va-Cecilia se va y nosotros comenzamos a hacer el parte, acabamos y llamamos a Cecilia. Se lo enseñamos y ella lo guarda para darlo en el seguro, me parece.

-Alejandro, quédate a comer, que hay comida de sobra-me ofrece Cecilia

-No tranquila, yo me tengo que ir que mi hermano me viene a recoger dentro de cinco minutos-les digo mientras me levanto de la silla.

-Bueno, pues nada, Andrea acompaña a Alejandro hasta la puerta-le dice la madre a la hija, esta última se levanta sin rechistar.

-Bueno Alejandro, cariño, ya nos veremos si necesitas alguna cosa, llama-le doy dos besos a Cecilia y Andrea me acompaña hasta la puerta, me da un abrazo y antes de irme me dice.

-Oye Alejandro, me puedes dar tu número, para quedar y tal-le sonrío y saco mi móvil para que apunte mi número.

-Esta semana la tengo libre si quieres podemos quedar-ella asiente, de repente escuchó el claxon del coche, me giro y veo a mi hermano, me despido de Andrea y me dirijo hasta el vehículo, entro en él y cuando ya tengo puesto el cinturón de seguridad mi hermano arranca.

-Ya puedes sacar por esa boca lo que ha pasado allí dentro y en la puerta-suspiro y procedo a contarle.

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Buenas, sé que dije que lo iba a subir, pero se me paso, pero aquí lo tenéis, espero que os guste.🫶🏼🫶🏼