Chang Bin y Felix como padres separados

IV

*

—Gracias Jeongin.

—No hay de que Bin, sabes que amo pasar tiempo con este travieso— Dice el menor cerrando la puerta principal despeinando al pequeño Lee Han que pasa a saludar a su padre y sube las escaleras directo a guardar sus cosas —Como te fue?

—No lo se... es que... le dije todo lo que pensaba y... ajá— Chang Bin realmente no sabía como resumir tantas cosas que habían pasado y sabía que si empezaba a hablar iba a llorar y no podía hacer eso cuando su hijo estaba a nada de bajar.

—Como reaccionó Felix?

El mayor suelta una risa nasal —Pues.

—Me imagino...

—Dijo que tenía que pensar las cosas.

—Dale tiempo...

—Listo!— Grita Lee Han bajando las escaleras con su mochila colgando de su espalda.

—Listo mi amor?

—Si!

—Muy bien... vámonos, nos acompañas?— Pregunta Bin hacia Jeongin el cual estaba despeinando al más chico por milésima vez en el día.

—Claro.

—Vamos.

*

—Felix!— El mayor toca con insistencia la puerta principal de la casa de Lix, ya tocaron el timbre, le mandaron mensaje y nada... algo no está bien —Tengo que entrar a como de lugar— Susurra volteando a ver a Jeongin —Puedes llevarte a Lee Han?— Pregunta, tenía miedo, tenía miedo de abrir esa puerta y encontrar alguna escena devastadora, sea lo que sea no se arriesgaría a qué Lee Han viera algo así.

—Claro, vamos al parque Lee Han.

—Okey...

Cuando Chang Bin ve a Jeongin y a su hijo alejarse los más posible; empieza a tocar con más impaciencia la puerta y forcejear para lograr entrar, entre tanto forrajero y empujando logra abrir la puerta.

Al entrar el primer piso es un completo desastre, la casa está en completo silencio así que decide llamar a Felix para comprobar que la casa esté sola, pero en cuanto termina de llamar a su nombre un pequeño y casi imperceptible llanto suena del segundo piso, entrando en pánico sube corriendo las escaleras entrando de inmediato a la habitación de Felix sin saber que era lo que aguardaba detrás de la puerta...

*

Felix salió de la casa de Chang Bin con los sentimientos a flor de piel, necesitaba un largo tiempo a solas para lograr pensar en que iba a hacer, si bien, quería estar con Chang Bin, la mayor parte de él estaba inundada en miedo, miedo de volver a sufrir por lo mismo de hace meses.

Conduce hasta su casa sin dejar de pensar las cosas, estaba 100% seguro de querer estar otra vez al lado de Chang Bin, eso ya era un hecho, pero no sabía si era lo correcto para él y para su hijo.

Cuando llega a su casa baja del adulto, entra y sube a su habitación para recostarse un rato, en cuanto su cuerpo toca la cama siente que es imposible despegarse de esta.

Cuando esta cayendo poco a poco en un sueño profundo lo despierta por completo un golpe que viene del piso de abajo, con algo de miedo baja poco a poco las escaleras pero a mitad de estas ve varias sombras pasar por la sala y la cocina... están robando su casa.

Quedó en shock, no sabía qué hacer, jamás le había pasado algo así, pero antes de lograr hacer cualquier cosa uno de aquellos tipos lo ve, Felix reacciona y de inmediato corre escaleras arriba dispuesto a encerrarse en su habitación y llamar a las autoridades.

Cuando tiene la puerta a pocos centímetros de él siente una mano enredándose en su cintura y la otra en su boca impidiendo cualquier grito por parte del menor.

—Hueles delicioso.

Esa voz...

Felix conocía esa voz, definitivamente la conocía de algún lado y no sabía de donde, fue lo único que dijo aquel tipo antes de entrar a la habitación dejando la puerta abierta para que los otros tres entraran. Quien tenía sujetado a Felix lo lanza a la cama.

Un grito por parte de Felix queda atrapado en su garganta en el momento que se da cuenta de quien era la persona que lo había tirado a la cama.

—T-Tu...