Patronus [Drarry]

capitulo 2: Solo un juego

Draco.

Lo pagarían caro.
Pansy y Blaise lo pagarían caro.
De eso estaba más que seguro mientras una cabellera rubia inconfundible corría hacia las mazmorras con notable prisa.
Draco ya se conocía el laberinto de las mazmorras, tanto, que podría recorrerlo hasta dormido, así que su trayecto hasta la sala común de Slytherin, fue, decepcionantemente corto.
Dijo la contraseña de la semana casi en un susurro, y se abrió paso con su tunica ondeando, en una aceptable imitación de su director de casa y padrino, Severus Snape.
Se sentó en un sillón frente a la chimenea que hacía conjunto con la habitación.
Su cuerpo estaba en las mazmorras, pero su mente estaba decidiendose donde colgaría el cadáver de esas serpientes traicioneras.
Era extraño no encontrar al Slytherin sin sus guardaespaldas, pero después de que prácticamente lo hubieran obligado a enviarle cartitas estúpidas, a San Potter, por amenazas de sus amigos, y sólo para darle diversión a estos. Draco no tenía muchas ganas de tener a esos dos subestimando los niveles de su paciencia.
Se puso a reflexionar en cómo había caído tan facil, bueno, no tanto, pero aun así termino aceptando.
Todo comenzó con un grupito de niños serpientes sentados alrededor del fuego, parecía una reunión para planear algún robo, pero no, todo lo que estaban haciendo era jugando una especie de juego (que Blaise les dijo que no era para nada muggle), (Y que Draco se nego desde el princio en participar. Pero un insistente Blaise termirmino convenciendolo) que consistía en una varita, unos jugadores, y encantamientos, que Theo se ofreció a conjurar, tomándolo como oportunidad para presumir su interior sabelotodo.
Escribieron los nombres de los nueve niños en el aire, en un tono naranja fuego, y con un elegante movimiento de la varita de Theo, se mezclaron en palabras nada comprensibles, para después de unos tres segundos arrojar solo dos nombres, uno color naranja y otro color dorado, (Blaise les explico amablemente que el dorado debía preguntar algo al de color naranja). Los primeros en aparecer fueron Millie (Naranja) y Vince (Dorado), fue un poco decepcionante su pregunta, pero para Draco pudo ser peor, proviniendo de ese ordinario cerebro.

-Mmmm.. Millie, ¿te gusta alguien? -Pregunto un nervioso Vince, el cual Draco no le prestó mucha atención, y menos a una sonrojada Millie que respondió con un débil << si >> y sin más que decir, siguieron con el juego.
Después de unas cuantas rondas, le tocó a Blaise y a Pansy.

-Bien, Pans -Dijo el chico, pensando la pregunta -te la voy a poner fácil. ¿Te atrae sentimentalmente alguien de esta habitación? -lo cual era una forma poco práctica de preguntar si alguien le gustaba. Pero sonrió victoriosamente cuando, una sonrojada Pansy miró de reojo a una aburrido Draco que daba mas señales de quedarse dormido, antes de que le tocara su turno.

-Si -Dijo volviendo la vista a Blaise quien sonría maliciosamente. Como. Como si se le acabará de ocurrir el plan más malvado que hubiera tenido.

Unas dos rondas después, fue el turno de que Theo y Draco.
El Slytherin sonrió maliciosamente, una sonrisa que era muy extraña de encontrar en el Theo callado y antisocial que casi siempre era. -Bien. Draco. Dime -Canturreó lentamente las palabras -Si hubieras tenido la oportunidad de ser el amigo de Potter, ¿que vinculo crees que tendían actualmente?

Draco, el cual no se había entusiasmado ante la mencion de su nombre, lo hizo con la pregunta de Theo, levantando el rostro en una gran molestia, debido al recuerdo, que para colmo, Greg tuvo el descaro de recordarle, como si su ego ya no hubiera sufrido mucho por aquel día.
El muy traidor río antes de decir -Draco no hizo más que hablar de Potter en cuanto se entero que iba en el tren. -se silencio un segundo ante la mirada asesina que el rubio le ofreció, así que calló por completo, antes de que una traidora como Pansy Parkinson abriera su bocota, que Draco hubiera estado más que feliz de embrujar si solo conociera algún hechizo para la ocasión.
-Es cierto. -Dijo la miserable- Nos abandono de nuestro vagón como si ese Potter fuera más especial que nosotros. Además solo eran rumores y Draco ya quería ser el primero en hacerse su amigo y arrastrarlo hasta nuestro compartimento. -Dijo recitandolo de memoria, cuando Draco lo había olvidado muy rápido, bueno, casi.

Todos voltearon a verlo como uno solo, y Draco tubo que resistir las ganas de embrujarlos a todos y largarse, pero un gentil Theo, lo amenazó diciendole que no había vuelta atrás y que había tenido la bondad de embruja el juego para que afectara a quien se fuera sin responder su pregunta. Slytherins al fin y al cabo.

-Lo habría abandonado cuando comenzó a juntarse con esa sangre sucia -Soltó Draco con un suspiro y añadió hasta sus miradas perplejas -Ya se, podría separarlos. Bien. Tal vez fuéramos amigos, pero sin ese traidor de sangre que carga a su lado como una verdadera plaga. -dio un vistazo a sus amigos, y los muy descarados lo presionaron con sus miradas para que dijera más -mmm... Quizá, no lo sé. Seríamos muy buenos amigos... ¡Pero ese imbecil se lo perdió por irse con la plebe con la que esta! -añadió rapidamente al verlos dudar, y siguieron con su juego sin más presiones sobre Draco.

Después de unas rondas más ya todos estaban cansados, y la mayoría habían vuelto a sus dormitorios, solo quedaban Draco y Theo en la sala común. Hasta que cierta pelinegra, se acercara a Draco con Blaise a su lado. Traían en sus manos una detención de parte de Snape. El cual no se había molestado en enviarla por otro medio, más que por sus compañeros de año.

-uh, uh, uh, -Canturreo Blaise al leerla en las narices de Draco -'Señor Malfoy, lo espero en mi oficina, mañana antes de clases, para acordar lo de su detención, sin una carta firmada por su representante, difícilmente se salve del castigo.
Severus Snape'.

- Se había tardado, ¿no lo creen? -Sujirio una atrevida Pansy, ignorando la presencia de Draco.

Theo levanto la vista de su libro, con una expresión en la que se leía algo tipo: Oh, Merlín, ¿que castigo estaré pagando yo, para tener que lidiar con estos niños? -Draco ¿Que hiciste? ¿En que problema te metiste? -Mantuvo una expresión gentil, incluso cuando Draco lo fulmino con la mirada.

-No les incumbe, bola de entrometidos. Ahora si me disculpan, me voy, tengo una cita con mi cama. Adiós -Añadió mientras se levantaba, y se disponía a irse, se estiro hacia Blaise para quitarle la carta, pero este la alejo de su alcance.

-Al parecer necesita una firma de tu padre, ¿no es así? -Ofrecio Blaise educadamente como el sangre pura que era. -uh, Draco, no tienes firmas de tu padre ¿verdad?, creo que debe estar verificada mágicamente. -Vaciló antes de llegar a su punto -Te podemos ayudar. Pero con algo a cambio.

Draco frunció el ceño -¿Ayudarme? ¿Quienes? ¿Cómo? -Y Blaise no tubo que escucharlo dos veces para sonreír, con algo de malicia en sus oscuros ojos.

-Veras, digamos que Pansy y yo tenemos.. Fuentes, y podemos darte la firma de tu padre, en una carta en blanco, -Pronuncio las palabras lentamente, como si se estuviera convenciendo a si mismo -Que.. Creemos, es una auténtica firma de Lucius Malfoy. -y al ver la expresión de esperanza en los ojos de Draco, supo que lo tenia.

-¿Y quien me garantiza que sea verdad? ¿Donde conseguirán una firma de mi padre a esta hora? ¿Como es que puedo creerles? -Al parecer Draco se negaba a creerles. Slytherins.

-Verás Draco, no todo te lo podemos decir. -Añadió una voz aguda que se manifestó como la de Pansy -Lo que sí te podemos decir, es que, a primera hora la tendrás, y si no la crees auténtica puedes devolverla, pero nos deberás un favor -miró a Blaise, luego a Theo y finalmente a Draco -un favor que solo te diremos cuando hallas ido con Snape, pero no te preocupes. No es nada del otro mundo -añadió al ver la cara de desconfianza que puso el Slytherin, pero al parecer su desesperación era mucha, porque terminó aceptando y llendose a dormir.

Si tan solo Draco hubiera sabido que ese favor sería agarrarlo de entretenimiento. Obligandolo a enviarse cartas con Potter en plena clase de pociones, no habría aceptado aunque su vida dependiera de ello, pero fue amenazado con que le revelarian a su director de casa y a su padre toda la verdad respecto a la nota. Asi que no tubo más opción que aceptar y dejar que su orgullo Malfoy fuera aplastado por un juego que inicialmente nunca quiso aceptar.
Solo quedaba esperar que el iluso de Potter creyera que era otra broma para el entretenimiento Malfoy. Bueno, casi.