Pasado

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—Mamá—

—Mande querido—

—Por que papá huye de los héroes y de la policía?— pregunto el niño intrigado

—Oh cariño, es algo que no entenderías—

—Quiero saber!— insistió dándole a entender a su madre que no dejaría de hablar hasta que le contestará lo que el quería, la mujer de cabello verdoso suspiro divertida con una pequeña sonrisa

—Bueno tal parece no te are cambiar de idea tan rápido, verás cariño, hace un tiempo tu padre cometió algo, el dice que se arrepiente de haber hecho eso pero como los héroes no escucharían sus disculpas, cuando estaba embarazada de ti nos vinimos acá a dónde está la clase baja—

—Ooh....oye mami—

—Dime—

—Mira— el niño apunto a una niña que tenía su edad, estaba en la carretera herida, se tomaba la pierna con dolor mientras sollozaba, Inko e Izuku se acercaron

—¿Cariño estas bien?— pregunto Inko tocando levemente la espalda de la menor, era alfa y se sabía por su débil aroma

—¡No!— exclamó dolida —me duele mucho la pierna! ¡un tipo de robo el poco dinero que tenía y me aventó aquí, me doble el tobillo y me lastime la pierna al caer! ¡aaau!—

—Okey, tranquila— Inko tomo a la menor en brazos —Izuku, vamos—

—Si mami— Izuku siguió a su madre, llegaron a su casa donde Inko la dejo en la habitación de Izuku, se la encargó en lo que iba por vendas y otras cosas, Izuku acepto cuidarla

La pequeña estaba sucia y traía su ropa gastada, rota y carcomida por las polillas, Izuku se sentó al lado de ella, su ropa tampoco era la mejor, Izuku también traía ropa gastada y estaría rota de no ser por su madre quien la remendaba

—Hola, soy Izuku, y tu?—

—A-aiko— susurro bajo

—¿Aiko?...que bonito nombre ^^— dijo amablemente y con una gran sonrisa, la niña sonrió también sin poder evitarlo, Inko regreso un par de según luego

—Bien pequeña, lo primero que hay que hacer es bañarte— Inko metió a Aiko a bañar, le lavo el cuerpo con cuidado, Izuku espero afuera obviamente, una vez limpia Inko le vendo la pierna y otras magulladuras que tenía

—¡Que bonita!— dijo Izuku

—¿Verdad? en unos días estarás bien, te puedes quedar aquí en lo mientras—

—O-oh no quisiera causarles molestias con esto—

—No te preocupes, no lo haces, bueno, está es la única habitación en la que te puedes quedar ¿estas bien con eso?—

—E-eh si, d-digo, ustedes me ayudaron jeje, gracias—

—No es nada— dijeron Inko e Izuku

Poco después llegó un alfa borracho, este le metió un puñetazo a Inko, Izuku le dijo a Aiko que no se preocupara, Aiko indecisa asintió, cuando el hombre se fue Izuku y Aiko fueron a ayudar a la mujer

Hisashi que era el nombre de dicho alfa macho acepto que Aiko se quedará con la condición de que no causara problemas

Todo parecía ir bien, pasaron los meses hasta que un día en invierno Hisashi se volvió el doble de violento de lo que era

~💚Un último adiós💚~ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora