ʟᴀ ᴠᴇɴɢᴀɴᴢᴀ ᴇꜱ ᴅᴜʟᴄᴇ ʏ ꜱᴇxʏ

18.

* * *

Unas decenas de minutos después de transformar la habitación en un laberinto.

Aún sentada en mi escritorio, balanceando las piernas, miré la esfera de cristal del tamaño de un puño en mi palma.

—¡Huh!

—¡Ugh!

El cristal era como una especie de proyector que ampliaba y mostraba una imagen del interior del laberinto.

Dentro del cristal, los dos hombres estaban siendo perseguidos por espíritus afilados que había convocado.

Gracias a las instrucciones que les había dado, no los atacarían si los atrapaban, pero corrían con todas sus fuerzas sin saberlo.

Aparté la mirada del cristal y solté una serie de insultos dirigidos al bastardo que había causado esta situación, a pesar de no estar presente en la habitación.

—¿Te has vuelto loco?

Ni siquiera un animal que no puede hablar se comportaría así.

El Conde Valentine había cometido un acto inaceptable.

Aprovechando que su esposa estaba durmiendo, metió a hombres en la habitación, fingiendo tener una relación ilícita y planeando despertar a las personas para crear un alboroto.

Había estado recibiendo informes sobre los recientes movimientos de este gremio que se involucraba en actividades turbias, por lo que Leader me había advertido.

'No pensé que realmente lo haría.'

Menos mal que les había dicho a los caballeros que protegían la mansión, que actuaran como si no notaran ninguna presencia sospechosa.

También había sido una elección acertada cambiar la habitación donde dormía la Condesa Valentine y su doncella.

Usando esto, tenía la intención de empujar al Conde Valentine hacia un abismo peor que el divorcio.

—Ah, estoy cansada.

Froté mis ojos somnolientos y mis hombros tensos. Sin embargo, mis manos débiles no me proporcionaron alivio.

Esto es algo en lo que Leader es hábil... ... Con pesar, giré mi cuello de lado a lado y se escuchó un crujido.

'¿Cuánto tiempo ha pasado desde que abrí el laberinto?'

Sin un reloj, no podía medir el tiempo. Parecían haber pasado 30 minutos, ¿debería darles otros 10 minutos antes de cerrarlo?

Me tapé la boca y bostecé. Hace mucho tiempo que no abro el laberinto, y siento que mi energía mental está siendo arrancada de raíz.

'Voy a tener días difíciles.'

Es por esto que odio esta habilidad.

Como descendiente de uno de los héroes que derrotó al dragón malvado, la habilidad especial de Labyrinth consumía mi energía mental para abrir un laberinto habitado por espíritus malignos.

Una vez dentro, nadie podía salir sin mi permiso.

Los cientos de espíritus malignos que habitaban el laberinto eran lo suficientemente poderosos como para destruir pequeños pueblos por sí mismos, pero todos obedecían mis órdenes.