📌1.

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Crowley paseaba por las calles de Londres en la Bentley a una velocidad normal,eso era raro en el demonio.
Pero,no había motivos para que apresurara el paso,después de que Aziraphale lo haya rechazado y abandonado para irse en el cielo no había motivos para acelerar.
Ya no tenía nada,ni a Aziraphale lo único que no quería perder,lo perdió,dejándolo con el corazón roto. Dejándolo solo.
Se sentía desechable, una basura.
Paro en el momento exacto dónde el semáforo le indicó que estaba en rojo,no tenía las ganas suficientes para ponerlo en verde,ya no no más.
Estaba claro que Crowley estaba sufriendo por la partida de Aziraphale,se presionaba para no llorar,no quería verse más patético de lo que ya se veía en aquel momento.
No quería llorar por un ángel.
Porque si lo hacía no iba a detenerse,realmente amo y amaba a Aziraphale más que a cualquier cosa.
Se preguntaba una y otra vez, ¿que fue lo que hizo mal para perder al amor de su vida?
Sabía que el ángel no lo elegiría,Aziraphale estaba tan pegado a las leyes de Dios que ni siquiera tenía tiempo de pensar en su propia felicidad.
Hasta negó su amistad muchas veces de las que podía contar con sus dedos.
Aun asi,dolía y mucho.
¿Porque se permitió amarlo en primer lugar?

El semáforo ya estaba en verde hace unos segundos atrás,las focinas de los otros autos hicieron que Crowley reaccionara y saliera de sus pensamientos,poniendo a el Bentley en marcha otra vez,volviendo su vista al camino.
Después de unos minutos manejando,estacionó el auto a en algún lugar alejado. Quito sus manos del volante,suspiro con pesadez,echando su cabeza hacia atrás y cerró los ojos lentamente.
Su cuerpo empezo a temblar sin control y simplemente lloró,traicionado a su mente. Lloró como si alguien hubiera muerto,se tapo la boca para que,por si había alguien, no lo escuchase.
No deseaba que alguien lo viera llorar,aunque las personas no sabían que él era un demonio del infierno,de igual forma no quería que alguien lo viera asi,tan débil e indefenso.
Por Satán,que bajo había caído,se decía así mismo una y otra vez.
Se limpiaba con la manga de su camisa las lágrimas que caían a mares.
Mientras intentaba limpiarse las lágrimas que no cesaban,estaba temblando como un niño,por un inútil intento mantenerse en la realidad y que su vista no se nublase,aunque eso era mas que imposible.
Permaneció así por unos minutos.
De un momento para otro se empezó a sentirse mal,más de lo que estaba,claro.
El dolor empezó en su estómago,que subía cada vez más,hasta llegar a garganta, empezó a toser sin parar,puso su mano en su boca nuevamente para que no se escuchase tan fuerte.
Después de unos segundos, y sin parar de toser,saco lentamente la mano de su boca y la miro un poco nervioso,estaba cubierto de pequeños pétalos de flores de color rojo y con una mezcla de sangre del demonio.Esto hizo que empiece a temblar aún más.

-"¡¿Qué mierda-a?!"-

Dijo casi jadeando,apenas podía hablar en ese momento.
Crowley pensó que eso solo les pasaba a los humanos,a los más débiles.
Él no era un humano,él era un ángel caído,un demonio del mismo infierno.
¿Como era posible esto?
¿Tal vez convivir con los humanos demasiado tiempo le había afectado o él se volvió débil?
Estaba preocupado.
Crowley sabía que esa enfermedad no desaparecería hasta que Aziraphale vuelva pero,el ángel no volvería y Crowley sabía muy bien eso.
Seguía expulsando pétalos de su boca con sangre,aun asi no se inmutó,no se molesto en remover los pétalos.
Dejaba que caigan lentamente de su boca,permaneciendo quieto,solo.
¿Así era como debía terminar todo?

Y ahí lo tienen,un Crowley tosiendo pétalos sin parar,sin nadie a alrededor para que lo consuele,con un corazón destrozado, completamente solo.

Fin.

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713 palabras-

Vi una teoría en tik tok y dije,¿y si le hago un fanfic? No es el mejor fanfic lo sé.
No se si alguien más lo hizo.
Pero bueno,si yo lloró,lloramos todos.

¡Adios!

𝙃𝙖𝙣𝙖𝙝𝙖𝙠𝙞;𝙂𝙤𝙤𝙙 𝙊𝙢𝙚𝙣𝙨.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora