Prologo.

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Era un día soleado.

Eran vacaciones aun para los de secundaria.

Pero para los de preparatoria y universidad eran apenas la primera semana de clases del semestre o del año.

En cambio para un chico de pelo verde y revoltoso era un día más en el que se lamentaba su miserable y patética vida de existencia mientras estaba en su cama acostado sin hacer nada.

Hubiera seguido en su cabeza llena de unas voces perturbadoras diciéndole lo inútil y mal hijo que era, si no fuera que su madre lo llamo desde la cocina.

Así que como buen hijo fue para allá levantándose de su cómoda cama.

Al llegar vio a una mujer algo bajita y llenita, con pelo verde como su hijo pero más oscuro, al igual que sus ojos y piel clara.

_¡Izuku!_

Dijo yendo con su hijo con un bento en la mano de tela estampada de emojis de caritas sonrientes.

_Tu papá olvido de nuevo su almuerzo, ¿puedes ir y dárselo a su trabajo?_

_¡Claro!_

Respondió con una gran sonrisa en la cara, antes de tomar el bento e irse caminando al trabajo de su papá.

_Recuerda que trabaja de maestro en la UA_

Grito a lo lejos desde la puerta de su casa a su hijo quien le dio un adiós con su mano mientras caminaba.




Estaba ya a solo dos pasos de entrar, así que paro de seco viendo esa enorme y grande escuela.

La UA, la escuela de sus sueños, y la que quedaría solo en sus sueños.

Tomo aire antes de dar solo dos pasos...y nada, el sistema de seguridad no se activo.

-¿Por qué no se encendió el sistema?-

Se pregunto mentalmente sin ser consciente de que de seguro su padre puso los datos de su esposa e hijo al igual que una foto para que se les reconocieran por si tenían que llevarle algo, como ahorita con su almuerzo.

-es ahora o nunca-

Y con esto dicho siguió su camino a la clase de su padre.

Sin quirk(Cancelado)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora