Ambos se quedan mirándose fijamente a los ojos, como si estuvieran esperando algún intercambio de palabras.
-Con que actúo con distancia...¿No es lógico, señor cuyo nombre desconozco?-Dice la chica cruzada de brazos.
-Oh, lamento no haberme presentado. Dígamos que no estoy aquí del todo...-Ella lo miraba raro ante ese comentario.-Soy Merlin Fenris.
Fenris...reconocía el apellido, pero no recordaba de dónde.
Un cuervo cerca del hombre chilla y los demás parecen reírse. El hombre se queda en silencio, como si le hubieran dicho una estupidez.
-La cúspide de la comedia...
Hanna miraba la situación confundida.
-¿Puedo saber el chiste?
-Incluso aunque te lo diga, no lo entenderías. ¿Por qué?Porque es el peor chiste que escuché en mi vida.-Se queda pensativo unos segundos.-Lilith contaba mejores chistes, y eso que ni graciosa es...
-Ah, ya me parecía el apellido, con nombrarla ya recordé. ¿Hermano?
-Lamentablemente.-Afirmó-Escuche, no quiero generarle incomodidad o desagrado. Al contrario, quiero ayudarla.
Hanna lo miraba con desconfianza todavía. Se la veía frustrada, agotada y molesta.
...
-Hanna...-La voz de Merlin era dulce y ansiosa, como si quisiera decir algo guardado desde hace tiempo.
-¿Si?-Ella esperaba una respuesta.
-Tengo que decir que eres la persona más interesante que he conocido en mi vida y que nunca creí que serías tan importante para mí.-Se acercaba más a ella y sostenía sus manos.-Porque lo eres...aunque eso ya lo sabes perfectamente.
El rostro de Hanna estaba rojo de la vergüenza y el cuerpo tenso por esa confesión.
-Tú también lo eres Merlin...-Sonríe timidamente.
Cuando él se acerca a ella, la besa tiernamente y las rosas a su alrededor habían empezado a florecer bajo la luz de la Luna.
...
-¡Merlin!
Dio un brinco y se sorprendió al sentir sus manos alrededor de su cintura.
-Dime.-Apoyó su mentón en el hombro de la joven mientras la abrazaba.
-Ya te había dicho antes que dejes de aparecer detrás de mí así, de la nada.
-¿Por qué?
-¿Eres idiota?
-No, pero no hay nada de malo.-Comienza a besar su cuello con suavidad.
-Hacer eso no hará que cambie de opinión.-Fruncía el ceño Hanna, aunque sabía que lo que hacía Merlin funcionaba.-¿Comiste algo?
-Algo así.
-¿Algo así?
-Ya sabes lo diferente que es...
-No es excusa. Deberías hacerlo para poder tener energía.
-Pero la sangre de animal llena demasiado poco sin importar cuánto consuma.-Sigue besando su cuello y la apreta levemente contra él.
-B-bueno...podrías intentar, no sé con algo en espe-
Unos colmillos se habrían clavado en ella, tomándola por sorpresa. A pesar de que sentía una molestia, Merlin estaba siendo delicado y suave en esa acción. Con una mano en la cintura y con la otra sosteniendo su cuello, la acorrala contra un escritorio.
-Merlin...
Se escuchó un pequeño gruñido por parte de él.
-Si esto era lo que querías, podías habérmelo dicho- ¡Ah!-Sentía cómo su lengua limpiaba la sangre de donde salía.
-Lo siento...-Sonaba apenado mientras se alejaba.
-¿Por qué?
-Porque podría haberme pasado. No te mataría pero te dejaría sin energía durante mucho tiempo.
Hanna suspira.
-Está bien, solo fue un poco...además, si te hace bien...-Sacude su cabeza.-¿Cómo te encuentras ahora?
-Mucho mejor...aunque me gustaba tenerte cerca mío. Más de lo normal.-Se vería un leve tono rojo en sus mejillas.
-A mi también...
Merlin la mira unos segundos. Se lo veía con normalidad, con más energía pero igual de tranquilo...o al menos esa era su fachada.
-¿Qué?-Mira al chico con curiosidad.
-Hanna...-Se acerca a ella una vez más, mirándola como si fuera la presa de un lobo.
Y una vez más la acorrala contra el escritorio.
-¿Puedo continuar...?